Las heladas que ocurrieron en los últimos días de agosto en el altiplano boliviano han causado daños en un 2% de la superficie cultivada, lo que se traduce en 748 hectáreas afectadas. A pesar de este impacto, las autoridades aseguran que no representa un riesgo para los precios ni para el suministro de alimentos de la canasta familiar. Esta información fue compartida el miércoles 20 de agosto por Álvaro Mollinedo, viceministro de Desarrollo Agropecuario.
Mollinedo explicó que el cultivo más perjudicado es la papa, con 379 hectáreas dañadas. Le sigue el maíz, que ha sufrido pérdidas en 188 hectáreas. También se han registrado daños en arveja con 80 hectáreas, tomate con 30, haba con 23, cebolla con 19, y pimentón, vainita y zanahoria, cada uno con 10 hectáreas comprometidas. Estos datos abarcan diez municipios de cuatro departamentos, afectando a al menos 2,600 familias productoras.
Impacto en la ganadería
En el sector ganadero, las heladas han afectado a 203 animales. De esta cifra, 155 son camélidos y 48 corresponden a ovinos. A pesar de estas pérdidas, la autoridad agropecuaria ha aclarado que la producción nacional se mantiene en condiciones normales. Además, se ha enfatizado que la seguridad alimentaria está garantizada, lo que significa que no habrá cambios en los precios de los mercados.
LDVY