La Corporación Minera de Bolivia (Comibol) ha decidido restringir el acceso de maquinaria pesada para la extracción de óxidos de plata y sulfuros en el Cerro Rico de Potosí, específicamente sobre la cota 4.400. Esta medida entrará en vigor la próxima semana y fue acordada en una reunión interinstitucional con la Federación de Cooperativas Mineras de Potosí y los presidentes de las cooperativas. El objetivo principal de esta decisión es mitigar los hundimientos que afectan al macizo rocoso.
La paralización de las actividades extractivas en el interior de la mina sobre la cota 4.400 tiene dos objetivos claros. Primero, se busca migrar las actividades mineras del Cerro Rico. Segundo, se pretende masificar el traslado de relleno seco en un volumen igual o superior a la cantidad de mineral que los operadores mineros extraen diariamente en el Cerro Rico. Estas medidas fueron acordadas entre la Gerencia Regional de la Comibol Potosí, la Federación de Cooperativas Mineras de Potosí y los presidentes de las cooperativas.
Durante un encuentro realizado en Potosí, la Fedecomin y las cooperativas mineras asumieron el compromiso de respaldar el plan de emergencia de relleno seco que la estatal minera ha estado ejecutando desde 2022. Además, reafirmaron su convicción sobre la necesidad de cesar las operaciones extractivas en el interior de la mina sobre la cota 4.400 para evitar una mayor degradación geológica irreversible del Cerro Rico.
Situación actual del cerro rico
Los geólogos y topógrafos de la Comibol presentaron una exposición detallada sobre la situación actual del Cerro Rico. En esta presentación, se planteó la urgencia de que las cooperativas respalden las medidas necesarias para prevenir problemas geológicos irreparables si no se toman decisiones correctivas a la brevedad. La migración de actividades mineras desde la cota 4.400 es un proceso irreversible, según lo señalado por el presidente ejecutivo de la Comibol, Reynaldo Pardo Fernández.
La máxima autoridad minera anunció que el cese de operaciones extractivas en el interior de la mina en la cúspide del Cerro Rico se llevará a cabo de manera gradual y cuenta con el respaldo de las cooperativas mineras. Las medidas también incluyen la fijación de un radio de seguridad y la creación de una zona prohibida para la extracción de óxidos de plata en el interior de la mina, que se extenderá 200 metros desde la cota 4.400 hasta la cúspide.
Restricciones y controles
Se prohibirán las actividades mineras durante los fines de semana y en horarios nocturnos. Además, se establecerán áreas rigurosas para controlar el tráfico y la comercialización del mineral que proviene del macizo rocoso. La semana pasada, junto con la Gobernación de Potosí, se definió un área de seguridad sobre la cota 4.400 utilizando un dron inteligente, que permitió inspeccionar un área aproximada de 2.000 kilómetros sobre la cúspide del macizo rocoso.
La inmovilización de actividades mineras ha estado en marcha durante más de un mes. Los operadores mineros están acelerando este proceso en colaboración con la Comibol, según un reporte institucional.