La Dirección de Desarrollo Arbitral de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) realizó la entrega oficial de insignias PRO a los árbitros y asistentes que, tras superar evaluaciones físicas, teóricas y técnicas, fueron categorizados como jueces profesionales habilitados para dirigir partidos del fútbol profesional.
El acto se llevó a cabo el reciente martes, en el marco de las celebraciones por los 100 años de la FBF, y contó con la presencia de autoridades del referato nacional. En total, 98 árbitros y asistentes de todo el país recibieron esta distinción, entre ellos cinco árbitros y cuatro asistentes de Oruro, quienes ahora forman parte de la élite arbitral nacional.
En la categoría PRO, fueron reconocidos los siguientes colegiados: árbitros centrales: Gery Vargas, Javier Revollo, Cristian Condori, Jonathan Mamani; árbitro VAR: Álvaro Campos; árbitros asistentes: Ronald Antonio, Jesús Ramírez, Juvenal Villca, Ruth Lima.
La insignia PRO representa el ingreso formal al arbitraje profesional, y en esta edición incluye un distintivo conmemorativo del centenario de la FBF, además de insumos especiales otorgados por FIFA, como el spray para delimitar barreras en tiros libres. El director de Desarrollo Arbitral, Víctor Hugo Chambi, destacó que este proceso forma parte de la profesionalización del arbitraje en Bolivia, señalando que se realizaron seis ciclos de capacitación durante la temporada.
Asimismo, adelantó que para fin de año se prevé continuar con las evaluaciones, que incluirán ascensos, descensos y una reducción en el número de árbitros PRO para la temporada 2026, con el objetivo de elevar los estándares del referato nacional.
“Felicitamos a cada uno de nuestros colegiados, sabiendo que fue el esfuerzo y la dedicación lo que los llevó a este logro. Mejora cada día, buscando la excelencia”, expresó la FBF en su mensaje oficial. La incorporación de árbitros orureños a esta categoría representa un paso importante para el referato regional, que busca consolidarse como referente en el país. El reconocimiento llega en un momento clave, donde la calidad arbitral es fundamental para el desarrollo competitivo del fútbol boliviano.