El gerente de la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa), Franklin Flores, encabezó el miércoles 6 de agosto de 2025 un operativo en varios hornos de La Paz. El objetivo de esta acción fue verificar que los panificadores estén utilizando la harina subvencionada por el Estado para la elaboración del “pan de batalla”. Esta inspección forma parte de un seguimiento continuo dirigido a quienes reciben este beneficio y busca asegurar la producción constante del pan básico.
Distribución de harina
Flores explicó que cada panificador registrado recibe cuatro sacos de harina de 50 kilos diariamente, incluso durante feriados y fines de semana. Este suministro se realiza bajo un acuerdo que tiene como finalidad garantizar el abastecimiento continuo del pan para las familias bolivianas. En este contexto, el gerente enfatizó que “no puede faltar pan ni un día”.
Otros insumos esenciales
Además de la harina, el Estado proporciona otros insumos esenciales, como azúcar, levadura y manteca. Estos recursos son fundamentales para mantener el precio del “pan de batalla” en 0,50 Bs por unidad. Esta medida busca controlar la inflación en productos básicos, especialmente en un entorno económico marcado por la escasez de combustibles y las presiones sobre el tipo de cambio.
Dudas sobre la transparencia
A pesar de los avances que ha destacado la autoridad, persisten dudas sobre la transparencia en la entrega de insumos y la efectividad de los controles aplicados. También hay cuestionamientos sobre la sostenibilidad financiera de estas medidas, especialmente en un contexto de déficit fiscal creciente.
LDVY