El Presidente de Bolivia, Luis Arce, reconoció que el suministro de diésel y gasolina en el país no está asegurado debido a la falta de financiamiento externo. Esta declaración se dio durante una conferencia de prensa tras su reciente viaje a Brasil, donde participó en la cumbre de los países Brics.
“Como lo hemos dicho, mientras tengamos estrangulado el financiamiento externo, mientras no tengamos la posibilidad de garantizar recursos para la compra y abastecimiento de diésel y gasolina, eso no está garantizado”, expresó Arce. Además, admitió que el Gobierno no puede asegurar el abastecimiento total de estos combustibles en el país debido a esta situación.
“Estamos en serias complicaciones como país”, agregó el mandatario.
Críticas a candidatos presidenciales
Arce también criticó las propuestas de los candidatos presidenciales, señalando que ninguno de ellos ofrece una solución estructural a la crisis que enfrenta Bolivia.
“Todos hablan de deuda, de privatizar, que no habrá empresas públicas, que van a liberar la exportación, liberar el tipo de cambio, pero ninguno aborda lo que la población demanda respuesta”, afirmó Arce.
Dependencia de créditos externos
El presidente destacó que sin la aprobación de créditos externos es “muy difícil” mantener el suministro actual de combustibles. Bolivia gasta aproximadamente 3.000 millones de dólares al año en la importación de combustibles y más de 2.000 millones de dólares en el pago de deuda externa.
Desde 2023, el país no ha recibido nuevos créditos aprobados, lo que ha llevado a una situación de “flujo negativo” de divisas. “Hasta abril, tuvimos una salida neta de más de 1.400 millones de dólares solo por servicio de deuda”, detalló Arce.
YPFB y la falta de fondos
En paralelo, el presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, también admitió que la empresa estatal carece de los fondos necesarios para importar la cantidad suficiente de diésel.
