Un informe de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) publicado este jueves 26 de junio de 2025 revela que el narcotráfico en Europa genera un impacto ambiental significativo. Este estudio documenta la contaminación de ríos y suelos debido a residuos tóxicos que provienen de laboratorios clandestinos y cultivos de cannabis en interiores.
La Oficina de la ONU contra la Droga y el Delito destaca que entre 2019 y 2023, tres países concentraron el 99 % de los vertidos reportados. En este contexto, España informó sobre 14 incidentes relacionados con la producción de drogas en una década.
En los últimos 5 años, se han desmantelado más de 4,300 laboratorios clandestinos en el continente. Estos laboratorios son utilizados principalmente para producir drogas sintéticas como metanfetamina, MDMA y anfetaminas. Cada kilo de MDMA genera hasta 58 kilos de residuos tóxicos, que suelen ser vertidos en suelos agrícolas, ríos o sistemas de alcantarillado sin ningún tipo de tratamiento.
Cultivo de cannabis en interiores
El cultivo de cannabis en interiores es dominante en Europa porque permite ocultar esta actividad ilegal mejor que las plantaciones en exteriores. Producir un kilo de flor seca de cannabis en interior puede generar más de 5,000 kilos de CO2, lo que es similar a las emisiones por consumo de energía de una vivienda familiar durante medio año.
En España, se han instalado plantaciones ilegales incluso en parques naturales, como los de Guadalajara y Málaga. Esta situación agrava el problema ambiental y pone en riesgo la biodiversidad de estas áreas protegidas.
Vertidos y riesgos asociados
Además, España informó a la ONU sobre 14 vertidos de residuos químicos relacionados con la producción de drogas entre 2013 y 2023. Esta cifra es considerada solo la punta del iceberg por los expertos en la materia.
Uno de los casos citados ocurrió en San Martín de la Vega (Madrid) en 2020, donde un laboratorio de cocaína estalló por la acumulación de gases inflamables. Este incidente resalta los peligros asociados con la producción de drogas en áreas urbanas.
Preocupaciones por la salud pública
El informe también señala que la mayoría de los vertidos están relacionados con drogas sintéticas como el MDMA o las anfetaminas. El uso creciente de viviendas y locales urbanos para producir drogas plantea riesgos para la salud y seguridad de los vecinos.
