El presidente Luis Arce ha señalado que el exmandatario Evo Morales es el responsable de la división que se ha generado en el movimiento popular de izquierda en Bolivia. Esta afirmación se produce a menos de dos meses de las elecciones generales, que están programadas para el 17 de agosto de 2025.
En una entrevista concedida a la agencia EFE, Arce acusó a Morales de haber fomentado bloqueos y conflictos que han impactado negativamente su administración desde que asumió la presidencia en noviembre de 2020.
División en el oficialismo
El oficialismo se presenta dividido ante las próximas elecciones. El Movimiento al Socialismo (MAS) postula al exministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, mientras que el presidente del Senado ha decidido competir por su cuenta. Evo Morales, por su parte, sostiene que tiene derecho a ser candidato, a pesar de no haber sido inscrito y de quedar fuera de la papeleta electoral.
Para Arce, su gobierno se ha convertido en “una víctima del ataque persistente” de Morales desde que asumió la presidencia. El presidente acusó al exmandatario de intentar “imponer” decisiones y de tratar de “sacar” ministros de su gabinete. Los ataques se intensificaron cuando Morales notó que en 2023 su administración “iba subiendo en la pretensión electoral”.
Conflictos y bloqueos
Arce expresó que el desempeño de su gestión hasta inicios de 2023 fue lo que “gatilló” los ataques del exmandatario, quien actuó de manera “despiadada”, utilizando “calumnias, difamaciones y denuncias sobre temas familiares”. Estos ataques tomaron una nueva dimensión con un reciente bloqueo de carreteras que se extendió por 14 días, impulsado por sectores leales a Morales, con el objetivo de forzar su candidatura.
Este conflicto resultó en la muerte de 4 policías y 2 civiles. El gobernante afirmó que Morales “estaba a la cabeza” de los bloqueos y que alimentó el conflicto bajo el “pretexto” de la falta de combustibles, divisas y el aumento de la inflación.
Defensa de la democracia
“Saludo al pueblo boliviano que no se dejó engañar. El verdadero objetivo (de Morales), que todos sabíamos cuál era, era que no haya elecciones. ¿Por qué? Porque él quería estar como candidato, cuando no puede serlo por una definición de nuestra Constitución”, remarcó Arce.
El presidente reiteró que “sí” habrá elecciones el próximo 17 de agosto y destacó que el principal mérito de su gestión ha sido obedecer el “mandato” del pueblo. Además, subrayó que se ha preservado la democracia “por sobre todas las cosas”.
Movilizaciones y resistencia
“Hemos soportado todas las movilizaciones del señor Evo Morales (…) hemos soportado todo para preservar la democracia del pueblo boliviano”, enfatizó en referencia a los 14 días de bloqueos impulsados por Morales en diferentes regiones del país.
Morales continúa insistiendo en su deseo de postularse a la presidencia, a pesar de no contar con un partido habilitado. El Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) ratificó recientemente que la reelección solo está permitida “por una única vez de forma continua”, lo que impide un tercer mandato. El exgobernante renunció al oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) después de casi 30 años y ha estado distanciado de Arce desde finales de 2021.
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