El cardenal estadounidense Robert Francis Prevost ha sido elegido como el papa León XIV. Su elección ha revelado un árbol genealógico fascinante, que incluye más de 100 antepasados directos con raíces en Nueva Orleans, España, Francia e Italia. Esta investigación sobre su linaje fue llevada a cabo por el genealogista Jari C. Honora, junto con especialistas de American Ancestors y del Cuban Genealogy Club of Miami. El estudio destaca la diversidad de su familia y sus conexiones históricas.
La genealogía de León XIV abarca hasta 15 generaciones. Este árbol familiar es considerado uno de los más diversos que se han elaborado en trabajos similares a lo largo de más de 10 años. La investigación más remota sobre su linaje se remonta a antepasados en España en el siglo XVI. Se localizaron documentos del censo de 1573 en Isla, donde al menos 4 de sus tatarabuelos eran registrados como “hidalgos”.
Antepasados españoles destacados
Entre los antepasados españoles se encuentra Diego de Arana Valladar, quien fue capitán de mar y tierra de la Armada Real. Este antepasado combatió a corsarios neerlandeses en el contexto de las disputas por posesiones en América. Su hijo, Diego de Arana Isla, sirvió en el ejército español y fue capitán de artillería en Panamá. A través de la hermana de este último, el pontífice está emparentado con Antonio José de Sucre, un personaje clave en la Batalla de Ayacucho y primer presidente constitucional de Bolivia.
Los descendientes de Diego de Arana Isla continuaron residiendo en La Habana durante 4 generaciones. Por vía paterna, al menos 5 generaciones provenían de Sicilia. El abuelo del papa nació en 1876 y emigró a Estados Unidos en 1905. Su pareja fue Suzanne Louise Marie Fontaine, quien nació en Francia y se trasladó a Estados Unidos aproximadamente 10 años después que Salvatore.
Raíces familiares en Francia e Italia
Dentro de los registros identificados, figuran 40 antepasados procedentes de Francia, 24 de Italia y 21 de España. Los antecesores franceses nacidos en el siglo XVII estaban asentados en Quebec durante la segunda mitad del siglo. Entre ellos destaca Louis Boucher de Grandpré, natural de Trois-Rivières, quien está vinculado a numerosos descendientes en Canadá.
Muchos ancestros franceses y cubanos migraron a Estados Unidos durante el mismo periodo en que los antepasados canadienses arribaban al país, estableciéndose finalmente en Nueva Orleans. Esta ciudad se convirtió en un punto de convergencia para poblaciones nativas, colonizadores franceses y españoles, así como esclavos africanos. Según el censo de 1805, más de la mitad de la población estaba integrada por personas libres y esclavizadas con ascendencia africana.
Propiedad de esclavos en la familia
El análisis genealógico identificó al menos 4 ancestros que fueron propietarios de esclavos en Estados Unidos. François Lemelle llegó a poseer al menos 20 personas esclavizadas. Otros ancestros también figuran como dueños: Joseph Aristide Baquié poseía 3 personas y Eugène Grambois 5. Charles Louis Boucher de Grandpré poseía por lo menos 11 esclavos entre 1799 y 1808.
En el entorno familiar del papa existieron personas identificadas como “mulato”, “persona libre de color” y “cuarterón”, sumando al menos 17 personas. Ocho antepasados negros del papa fueron propietarios de al menos 40 personas esclavizadas. Una historia relevante corresponde a Marie Louise, quinta tatarabuela del papa, quien figura como “negra libre” en un documento sucesorio.
Libertad y legado familiar
Marie Jeanne, cuarta tatarabuela del papa, había sido esclavizada por François Lemelle, quien le concedió libertad mediante un acta en 1772. Treinta años después, Marie Jeanne era propietaria de 421 hectáreas y 5 personas esclavizadas.
El análisis genealógico revela que las raíces familiares del papa están marcadas por una compleja historia social que incluye tanto la propiedad como la liberación dentro del contexto histórico estadounidense relacionado con la esclavitud.
