La Liga Boliviana de Básquetbol (Libobásquet) continúa en una pausa obligada debido a los conflictos sociales que se viven en el país. De momento, las fechas seis y siete no se llevan adelante, algo que representa un desfase en la programación del campeonato que pretende concluir en el mes de agosto. Los equipos orureños volcaron su mirada al certamen local a la espera de una pronta solución.
Desde el viernes, se suspendieron algunos partidos de la fecha seis debido a los bloqueos que hay en el territorio nacional, esto, por velar la seguridad de los deportistas, ya que las manifestaciones en algunas regiones se han tornado violentas. De la fecha anterior solo restaba jugar el encuentro entre Nacional Potosí y Club Atlético Nacional (CAN), previsto para el sábado 7 de junio en la Villa Imperial.
En esta semana debía comenzar la fecha siete del campeonato con los encuentros entre Calero y Pichincha, clásico potosino, previsto para el lunes; y el cotejo entre Kinwa y Nacional Potosí, estaba programado para el martes por en la sede de Gobierno. Ambos encuentros no se disputaron, por disposición de la Federación Boliviana de Básquetbol (FBB) debido a que siguen los conflictos en el país.

Club Atlético Ramallo Lafuente (Carl A-Z) estaba a la expectativa de la visita a Universitario de Sucre, encuentro previsto inicialmente para este miércoles, pero el mismo no se llevará adelante. De la misma manera, CAN se preparaba para ser local ante Leones de Potosí, encuentro que, por cómo está la situación en el territorio nacional, es poco probable que se juegue. El cotejo está programado para el jueves en el coliseo “Luis Lazzo Quinteros”.
Ante esto, los equipos orureños han volcado su mirada hacia el certamen local, donde tanto CAN como Carl A-Z han clasificado a la final del torneo. Por lo tanto, ambos aprovecharán esta serie de playoffs al mejor de tres, para seguir en ritmo deportivo y retornar con fuerza a la Libobásquet.