El contrabando desde Bolivia hacia Argentina sigue operando sin grandes obstáculos, a pesar de la reciente instalación de una valla de alambre de acero en la frontera de Aguas Blancas, en la provincia de Salta, según informaron medios argentinos.
Esta valla fue implementada por el gobierno argentino con el objetivo de detener el paso ilegal de mercancías, que incluye productos de contrabando y narcóticos. Sin embargo, los medios de comunicación del país vecino han reportado que esta barrera no ha logrado el efecto disuasivo que se esperaba.
Según el gobierno argentino, la estructura tiene una longitud aproximada de 200 metros y fue construida con un costo de 36 millones de pesos argentinos, lo que equivale a unos 30 mil dólares.
Rutas alternativas de contrabando
Aunque la obra aún no ha sido oficialmente entregada, los contrabandistas ya han encontrado rutas alternativas para continuar con el cruce irregular desde la localidad boliviana de Bermejo.
De acuerdo con el portal digital Todo Noticias (TN), que citó un reportaje televisivo local, carritos cargados con bultos de ropa, electrodomésticos, comida y neumáticos siguen ingresando desde Bolivia sin cumplir con los controles fiscales establecidos.
Diferencias de precios
Las imágenes y testimonios recogidos en el lugar muestran a personas cruzando el río con facilidad, aprovechando la notable diferencia de precios entre ambos países. TN destacó que los precios en Bolivia son hasta un 80% más bajos que en Argentina, lo que incentiva el flujo constante de compras y su traslado ilegal.
Según los reportes de los medios argentinos, una docena de zapatillas puede costar alrededor de 100 mil pesos argentinos, que son aproximadamente 580 bolivianos. Además, electrodomésticos como lavarropas se adquieren en Bermejo por menos de la mitad del precio en el norte argentino.
Costos de cruce
El servicio de traslado por parte de pequeños vehículos conocidos como “peseros” también continúa operando a un bajo costo adicional. Según el reporte de TN, pasar de un lado a otro sin presentar ningún tipo de documento puede costar entre 2 mil y 3 mil pesos argentinos.
Los controles en la frontera son prácticamente nulos y el negocio del contrabando sigue creciendo. Las fuerzas de seguridad, como Gendarmería, Prefectura y Policía Federal, en muchos casos solo observan. De vez en cuando, detienen a alguien para revisarlo, pero el flujo de mercancías no se detiene.
Cuestionamientos al comercio argentino
“Hasta hace poco, uno llegaba a Bolivia y tenía que llevar dólares o pesos argentinos. Ahora se puede pagar con cualquier billetera virtual. ¿Cómo compite el comercio argentino frente a esta realidad?”, cuestionó TN.
Medidas del gobierno boliviano
El 26 de mayo, el Presidente Luis Arce presentó 11 medidas y siete decretos con el fin de garantizar la provisión de alimentos en el país y evitar el contrabando a la inversa, así como el contrabando de combustibles.
“Estas acciones buscan preservar el poder adquisitivo, garantizar el abastecimiento de productos esenciales y frenar los efectos especulativos que se están produciendo en los precios”, declaró el mandatario en ese entonces.
Desde la crisis cambiaria que comenzó en febrero de 2023, la moneda boliviana se ha devaluado frente a las de los países vecinos y el dólar, lo que ha alentado el contrabando a la inversa, principalmente de alimentos como aceite, arroz, azúcar, carne e incluso ganado bovino en pie.
