Corea del Norte ha anunciado una renovación significativa en su cúpula militar. Esta decisión incluye el nombramiento de nuevos comandantes y directores de la Oficina de Artillería y Seguridad. La renovación se llevó a cabo durante una Comisión del Partido de los Trabajadores, que se celebró el 28 de mayo de 2025. Este cambio se produce tras un accidente ocurrido durante la botadura de un nuevo destructor el 21 de mayo y en medio de crecientes tensiones con Estados Unidos.
La reforma militar fue presidida por el líder norcoreano Kim Jong-un. Durante esta reunión, se nombraron a 6 nuevos comandantes de unidad de cuerpo, al director de la Oficina de Artillería y al director de la Oficina de Seguridad. También se enviaron varios comisarios políticos. La comisión concluyó que es necesario fortalecer las capacidades de defensa nacional y establecer tareas inmediatas para las actividades militares y políticas.
En esta octava reunión de su tipo, se discutieron medidas militares para mantener la superioridad estratégica y táctica en todos los aspectos. Se aprobaron varios nuevos proyectos en los campos de la ciencia y la industria de defensa, aunque la Agencia Central de Noticias de Corea (KCNA) no proporcionó detalles específicos sobre estos proyectos.

Accidente del destructor
La renovación militar ocurre poco después del accidente que tuvo lugar durante la botadura del nuevo destructor. Este incidente, que ocurrió el 21 de mayo, se produjo en presencia de Kim Jong-un, quien calificó lo sucedido como “un acto criminal intolerable”. Como resultado de este accidente, varios altos funcionarios han sido detenidos en el marco de la investigación abierta, entre ellos el subdirector del Departamento de la industria de municiones del partido.
Es inusual que el régimen norcoreano reconozca públicamente fallos técnicos o administrativos. Generalmente, Corea del Norte tiende a ocultar incidentes que puedan interpretarse como señales de debilidad o incompetencia. Los cambios en la cúpula militar también llegan pocos días después de que el régimen emitiera un mensaje más beligerante hacia la Administración del presidente estadounidense Donald Trump.
Acusaciones hacia Estados Unidos
Pionyang ha acusado a Washington de intentar impulsar un posible escenario de guerra nuclear en el espacio, refiriéndose a su “cúpula dorada”. Además, Corea del Norte ha señalado que el sistema antimisiles con interceptores espaciales que planea construir será “el detonante de la carrera armamentística nuclear y espacial mundial”. El régimen considera que garantizar su seguridad es posible “mediante la simetría de un poder incomparable” capaz de enfrentar los desafíos actuales y futuros.