La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) ha exigido al gobierno de México que tome medidas inmediatas para detener el flujo de aguas residuales y desechos industriales que están contaminando el océano Pacífico en la frontera con California. Esta solicitud se realizó durante una visita a San Diego el 24 de abril de 2025.
Contaminación del Río Tijuana
El Río Tijuana, que recorre aproximadamente 195 kilómetros desde México hasta California, se ha convertido en un canal de contaminación. Esto se debe al envejecimiento de las plantas de tratamiento de aguas residuales en Tijuana y al crecimiento descontrolado de la población y la industria en la región.
Desde 2018, más de 100.000 millones de galones de aguas residuales sin tratar han cruzado la frontera hacia el condado de San Diego. Esta situación afecta a quienes nadan o surfean en las playas cercanas, así como a trabajadores como agentes de la Patrulla Fronteriza, estudiantes y residentes locales. Muchos de ellos han reportado problemas de salud debido a la exposición a bacterias y químicos.
Impacto en la salud
Entre 2019 y 2023, se registraron 1.168 casos de enfermedades gastrointestinales agudas entre los Navy SEALs que entrenan en las aguas contaminadas. Durante su visita, el representante Zeldin se reunió con la secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales de México, Alicia Bárcena, para discutir posibles soluciones. Bárcena aseguró que el gobierno mexicano está comprometido a resolver el problema. “Estamos aquí porque queremos solucionar esto”, afirmó Bárcena.
Entre los proyectos en marcha, México ha reparado la planta de tratamiento de aguas residuales San Antonio de los Buenos, que ahora opera a plena capacidad. Sin embargo, Zeldin subrayó que aún queda mucho por hacer, incluyendo la instalación de compuertas para recolectar basura en Tijuana y la construcción de infraestructura para desviar 10 millones de galones de aguas residuales lejos de la costa.
Inversión y retrasos
Desde 2020, Estados Unidos ha destinado más de 653 millones de dólares para abordar esta crisis. Zeldin señaló que los retrasos por parte del gobierno mexicano han impedido avances significativos. Además, México aún debe aportar 88 millones de dólares prometidos en un acuerdo de 2022. La contaminación representa un problema que afecta directamente la capacidad del personal militar para entrenar con seguridad.
Veteranos como Jeff Gum han calificado esta situación como una “crisis nacional”. El alcalde de Imperial Beach, Paloma Aguirre, también ha expresado su preocupación sobre el impacto ambiental y sanitario. En una carta dirigida a Zeldin, Aguirre detalló que desde 2023 más de 31,000 millones de galones han cruzado la frontera, afectando la calidad del aire y el agua.
Urgencia de soluciones
Durante su visita, Zeldin enfatizó la necesidad urgente de implementar soluciones concretas: “No podemos pedirle a la gente de California que tenga más paciencia mientras seguimos atrapados en esta crisis”. Zeldin y Bárcena acordaron reforzar las acciones conjuntas y redactar un plan detallado que incluya todos los proyectos necesarios para resolver el problema.
Aunque Zeldin reconoció el compromiso del gobierno mexicano, dejó claro que Estados Unidos espera resultados tangibles: “México necesita cumplir con su parte en la limpieza”. La colaboración entre ambos países será clave para alcanzar una solución definitiva.

Presión de la comunidad
Mientras los gobiernos trabajan juntos para abordar esta crisis, aumenta la presión por parte de residentes, líderes locales y grupos ambientalistas. Como señaló Zeldin, “la paciencia se ha agotado”, lo que hace más urgente encontrar soluciones inmediatas.
La contaminación del Río Tijuana no solo afecta a las comunidades locales, sino que también tiene implicaciones económicas significativas debido al impacto en actividades recreativas y laborales en ambas naciones.