El presidente de la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo (Cainco) de Santa Cruz, Jean Pierre Antelo, ha expresado su descontento con el Gobierno por la demora en reconocer la crisis económica que enfrenta el país. Antelo ha solicitado medidas urgentes para abordar esta situación, señalando que el modelo económico actual se encuentra agotado.
En declaraciones a los medios de comunicación, Antelo afirmó: «Hemos escuchado a varios ministros, al Presidente Luis Arce en varios eventos públicos, que la economía está mal. Lamentablemente, ha sido muy tarde; y lo que hoy requerimos es tomar acciones para que este sinceramiento pueda causar el menor daño no solo a la economía del país, sino a las familias bolivianas».
Modelo económico agotado
El Ejecutivo ha declarado que la situación económica es resultado de un modelo que está “acabado” y ha sugerido priorizar la inversión en empresas públicas que actualmente presentan déficit. Antelo recordó al Gobierno que el sector productivo es fundamental para el desarrollo económico del país y puede ser el principal generador de divisas, aunque necesita apoyo para lograrlo.
Antelo añadió: “El modelo está totalmente agotado, que invirtió en empresas públicas, deficitarias, que dejó de lado al sector privado y productivo. Hay inflación que siente la población y una crisis que será profunda si seguimos postergando las decisiones estructurales que requiere el país”.
Problemas de combustible
Respecto a la escasez de combustible, que el Gobierno atribuye a la falta de dólares, Antelo indicó que la situación aún no se ha resuelto. Aseguró que se siguen implementando medidas temporales, que él considera «parches», en lugar de soluciones estructurales.
“Hay que dar certidumbre, que nos digan si seguiremos haciendo cola o está garantizado el combustible. El campo no espera, la gente no espera, necesitamos certidumbre. Dense una vuelta por las ciudades y verán las familias sufriendo y eso traerá consecuencias”, enfatizó Antelo.
Escasez de combustible
Desde hace aproximadamente tres semanas, Bolivia enfrenta una escasez de combustible. Según el Gobierno, esta situación se debe a la falta de dólares y ha culpado a la Asamblea Legislativa por no aprobar los créditos pendientes.
A pesar de que las autoridades del sector han aumentado los volúmenes de distribución, las filas para conseguir diésel continúan, lo que agrava la situación para los ciudadanos. La crisis del combustible sigue afectando a la población, que enfrenta dificultades en su día a día.
