Desde que comenzó la guerra en Gaza en octubre de 2023, Israel ha llevado a cabo diversas formas de violencia sexual y de género contra la población palestina. Estas acciones, en algunos casos, podrían ser consideradas crímenes de guerra y contra la humanidad, así como «actos genocidas» debido a la sistemática destrucción de instalaciones de salud sexual y reproductiva, según un informe de Naciones Unidas.
Este documento fue presentado el jueves 13 de marzo de 2025 por la Comisión Internacional Independiente de Investigación sobre el Territorio Palestino Ocupado, que fue creada en 2021 por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. En sus 50 páginas, el informe detalla diversas formas de abusos cometidos por las fuerzas israelíes, donde mujeres y niñas son las principales víctimas.
La jurista sudafricana Navi Pillay, presidenta de la comisión y exjueza de la Corte Penal Internacional, destacó que «las evidencias recogidas revelan un terrible incremento en la violencia sexual y de género». El informe sostiene que este tipo de violencia se ha convertido en «una estrategia de guerra de Israel para dominar y destruir al pueblo palestino».
Tipos de abusos documentados
Entre los abusos denunciados en el informe se incluyen violaciones a detenidos y tratos humillantes en centros de detención. También se mencionan redadas y controles que obligan a las víctimas a desnudarse o a ser fotografiadas y filmadas en circunstancias degradantes.
Una de las víctimas de esta violencia sexual fue el médico Adnan al-Bursh, quien era jefe del departamento de ortopedia en el principal hospital de Gaza, Al Shifa. Al-Bursh fue detenido en diciembre de 2023 durante el asedio israelí a la instalación y murió en prisión en abril de 2024 tras sufrir maltratos.
Justicia internacional demandada
Estos abusos se han llevado a cabo en un clima de impunidad. Según Pillay, esto debe ser contrarrestado con investigaciones que incluyan a la Corte Penal Internacional o tribunales nacionales, ya sea bajo las legislaciones de sus países o ejerciendo la jurisdicción universal.
El informe también denuncia que las fuerzas israelíes han destruido de manera sistemática numerosas instalaciones de salud sexual y reproductiva en Gaza. Al mismo tiempo, se ha bloqueado la llegada de medicamentos y equipos necesarios para garantizar el bienestar de embarazadas y mujeres en el parto o postparto.

Consecuencias para las mujeres
Como resultado, «mujeres y adolescentes han muerto en complicaciones durante el embarazo o el parto debido a las limitaciones impuestas por las autoridades israelíes», lo que podría considerarse un delito contra la humanidad de «exterminio», afirma el documento.
Los ataques a las infraestructuras sanitarias han afectado a aproximadamente 540,000 mujeres en edad reproductiva. El informe recuerda que hace solo un año, solo 2 de los 12 hospitales de Gaza para la salud sexual o reproductiva seguían funcionando, y que en el conflicto se han cuadruplicado los abortos espontáneos.
Otros ataques mencionados incluyen uno en diciembre de 2023, que destruyó la mayor clínica de fertilidad de Gaza, donde se perdieron 4,000 embriones. También se reportó un ataque un mes antes contra un centro para mujeres víctimas de maltrato, donde un tanque disparó contra la planta del edificio donde estas mujeres y algunos de sus familiares se alojaban. Los soldados dejaron pintadas con insultos en las paredes del lugar, según relata el documento.
Mujeres como objetivos de ataques
La comisión también documentó casos en los que mujeres y niñas de todas las edades, incluidas las embarazadas, fueron objetivo directo de ataques de francotiradores. Este tipo de acciones también se define en el informe como un crimen contra la humanidad y de guerra.
Un caso denunciado fue el de una mujer embarazada que fue asesinada de un disparo por un soldado de las Fuerzas de Seguridad de Israel cuando se acercaba al hospital de al-Awda, en el norte de la Franja, en diciembre de 2023. Su cadáver no fue recuperado hasta 20 días después, en estado de descomposición.
Estos ataques se produjeron en un clima enrarecido por declaraciones de oficiales y parlamentarios israelíes que instaban a no hacer distinción entre civiles y militantes armados, considerando a todos como cómplices que debían ser exterminados sin importar la edad o el género.
Testimonios de víctimas
El informe se presentó en la misma semana en que la comisión, que también incluye a los expertos Chris Sidoti de Australia y Miloon Kothari de India, celebró dos días de audiencias. Durante estas audiencias, se escucharon testimonios de víctimas y testigos de esta violencia sexual y de género, así como de los sanitarios que atendieron a las afectadas.
La comisión recuerda en el documento que un tercio de los muertos en el conflicto de Gaza, aproximadamente 48,000 según las autoridades gazatíes, han sido mujeres y niñas.