La Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) ha emitido una advertencia sobre el peligro que representa la escasez de diésel para la seguridad alimentaria en Bolivia. La organización señala al Gobierno como el principal responsable del desabastecimiento, que ha llevado a la formación de largas filas en las estaciones de servicio.
Klaus Frerking, presidente de la CAO, ha alertado sobre el aumento de costos en la producción y cómo esto afectará los precios de la canasta familiar. Frerking considera que el Gobierno es el “único responsable” de encontrar soluciones efectivas para el desabastecimiento de diésel y gasolina.
El presidente de la CAO ha declarado: “La falta de carburantes viene generando graves secuelas en las cadenas de suministro de distintos rubros por el incremento de los costos directos y las dificultades operativas, en directo desmedro de toda la población boliviana”.
Aumento de costos de producción
Frerking ha advertido que, debido a la situación actual, los costos de producción aumentarán, lo que a su vez repercutirá en el precio de los productos de la canasta familiar. En relación a la propuesta del Gobierno de vender combustible a precio internacional, el presidente de la CAO ha señalado que esto resultará en una “elevación en todos los costos de la cadena de abastecimiento”.
Propuestas para el mercado nacional
El representante de la CAO ha instado a la necesidad de permitir la libre importación y comercialización de carburantes en el mercado nacional, sin restricciones ni obstáculos. Además, ha pedido que se eliminen el diésel y la gasolina de la lista de sustancias controladas para acabar con las extorsiones.
Eliminación de disposiciones
En esta ocasión, Frerking ha solicitado la eliminación “inmediata” de la disposición adicional séptima del Presupuesto General del Estado (PGE). También ha pedido que se detengan las intervenciones, confiscaciones y el amedrentamiento a las diversas actividades productivas en el país.