Un bombardeo accidental ocurrió durante un ejercicio de fuego real de la Fuerza Aérea de Corea del Sur, dejando un saldo de 15 heridos en Pocheon, al norte del país, este jueves 6 de marzo a las 10:05 horas. Este incidente se produjo debido a un error cometido por un piloto al ingresar las coordenadas de lanzamiento de los proyectiles, que impactaron fuera del área designada.
En el ejercicio de entrenamiento participaban 2 cazas KF-16, cada uno de los cuales lanzó cuatro bombas MK-82 que cayeron fuera del área prevista. Entre los heridos se encuentran 2 hombres con lesiones graves, aunque los bomberos han indicado que sus vidas no corren peligro. También se reporta que hay dos soldados y dos extranjeros entre los afectados por el accidente.
Ubicación del accidente
El accidente tuvo lugar en el campo de entrenamiento de Seungjin, situado a 50 kilómetros al norte de Seúl. Un portavoz de la Fuerza Aérea confirmó que, basándose en el testimonio del piloto, se identificó un fallo en la introducción de coordenadas durante la preparación del vuelo. El Ministerio de Defensa ha indicado que la causa exacta del incidente sigue siendo objeto de investigación.
Respecto al segundo avión, las autoridades han señalado que aún están evaluando si su lanzamiento fallido estuvo vinculado al error del primero. Aproximadamente diez personas han sido hospitalizadas debido a las lesiones sufridas durante el incidente.
Reacciones del Ejército
El Ejército ha expresado su profundo pesar por el daño causado a la población civil y ha manifestado su deseo de una pronta recuperación para los heridos. En un comunicado, se comprometieron a implementar todas las medidas necesarias para compensar a los afectados.
Este accidente ocurrió fuera del área de entrenamiento en el marco de ejercicios militares conjuntos entre Corea del Sur y Estados Unidos, como parte de los preparativos para el ejercicio anual Freedom Shield, que comenzará el próximo lunes. La zona está ubicada a unos 25 kilómetros de la frontera con Corea del Norte.
Comité de respuesta
La Fuerza Aérea ha establecido un comité de respuesta encabezado por el subjefe del Estado Mayor Conjunto, el teniente general Park Ki-wan, para investigar las causas del incidente y evaluar los daños. Las bombas involucradas son dispositivos diseñados para atacar infraestructuras como puentes y edificios. Según datos militares recopilados por la agencia local Yonhap, una sola bomba puede generar un cráter de hasta 8 metros de diámetro y tiene un radio de impacto similar al de un campo de fútbol.
