El Departamento de Estado de Estados Unidos ha desarrollado un plan que contempla el cierre de una docena de consulados en el extranjero durante el verano, principalmente en Europa. Esta información fue reportada el jueves 6 de marzo por el diario The New York Times.
Según el medio, que se basa en fuentes oficiales estadounidenses, algunas de las oficinas consulares que se verían afectadas son las de Florencia (Italia), Estrasburgo (Francia), Hamburgo (Alemania) y Ponta Delgada (Portugal). También se menciona el cierre de una misión en Brasil.
Despidos de empleados locales
El plan del Departamento de Estado también incluye la posibilidad de despedir a ciudadanos locales que trabajan en las numerosas embajadas y consulados de Estados Unidos. Estos empleados son fundamentales para apoyar las labores del personal diplomático estadounidense.
Un portavoz del Departamento de Estado comentó a EFE que «el Departamento de Estado continúa evaluando nuestra postura global para garantizar que estemos mejor posicionados para abordar los desafíos modernos en nombre del pueblo estadounidense».
Recortes en la administración
El cierre de consulados se alinea con los planes del magnate Elon Musk, quien es un aliado cercano del expresidente Donald Trump. Musk ha propuesto recortes significativos en el gasto de la Administración, lo que incluye el cierre de oficinas y programas, así como el despido masivo de empleados federales.
Estas decisiones se producen en un contexto en el que China ha superado a Estados Unidos en el número de misiones diplomáticas en el mundo. Actualmente, China cuenta con 274 misiones, mientras que Estados Unidos tiene 271, según un estudio del Instituto Lowy.
Diferencias entre embajadas y consulados
Las embajadas son las representaciones diplomáticas oficiales y se encargan de mantener las relaciones políticas con el país anfitrión. En cambio, las oficinas consulares se ocupan de asuntos administrativos, como la expedición de visados para extranjeros, y brindan apoyo a los ciudadanos estadounidenses que se encuentran en el exterior.
En su primer día en el cargo, el secretario de Estado Marco Rubio informó a los empleados sobre la posibilidad de «cambios» dentro del departamento, aunque aseguró que estos no serían «destructivos».