Pacientes en Bolivia han denunciado que los precios de los medicamentos que necesitan para tratar enfermedades crónicas y otras condiciones ambulatorias han aumentado en los últimos meses hasta un 100%. Esta situación, que es consecuencia de la crisis económica que atraviesa el país, pone en riesgo la vida de muchos de ellos.
Según Jaldín, en las farmacias de La Paz, los ciudadanos se enfrentan a precios elevados o, en algunos casos, a la falta total de medicamentos, ya que los laboratorios «no logran importar lo de antes».
Una encargada de una farmacia en el centro de La Paz lamentó que «lamentablemente» hay medicamentos que «no están llegando por la escasez del dólar». Además, mencionó que otros productos han incrementado su precio en al menos un 30%, lo que les impide mantener los mismos precios, ya que «tampoco conviene».
Medicamentos para enfermedades crónicas
La situación se repite en otro dispensario, donde se ha observado un aumento en los precios, especialmente de los medicamentos para enfermedades crónicas. «No se encuentran. Si hay, lo poco que tenemos se vende en menos de una semana y tarda en llegar de nuevo», explicó una encargada.
Rosario Calle, presidenta de la Asociación de Personas con Cáncer y Familiares de Bolivia, indicó a EFE que otros medicamentos controlados, como la morfina y el tramadol en gotas, tampoco están disponibles ni en el seguro ni en las farmacias.
Impacto en pacientes crónicos
Si bien para otras especialidades el precio de los medicamentos ha aumentado en un 30%, la situación es más crítica para los pacientes con enfermedades crónicas, quienes enfrentan incrementos de hasta el 100% en los precios de sus medicinas e insumos.
Rosalía Conde, representante de enfermos con cáncer de un hospital en la ciudad de El Alto, comentó que «la situación está peor». Por ejemplo, una jeringa que antes costaba 5 bolivianos (0,72 dólares) ahora cuesta 10 bolivianos (1,45 dólares).
Conde también mencionó que medicamentos como el tamoxifeno, utilizado después de la quimioterapia y radioterapia, han duplicado su precio y son difíciles de conseguir. «Antes la caja costaba 60 bolivianos (8,68 dólares) y ahora cuesta 120 bolivianos (17,3 dólares)», afirmó.
Problemas con el Seguro Universal de Salud
Además, la falta de atención en las farmacias del Seguro Universal de Salud (SUS) obliga a los pacientes a buscar sus medicamentos en farmacias privadas. «A veces vamos directamente a los laboratorios y compramos, porque en las farmacias el precio es superior o lo poco que llega no abastece», explicó Conde.
La situación es tan grave que algunos pacientes están optando por dejar de recibir tratamiento, ya que deben invertir mucho dinero en medicamentos y no cuentan con los recursos necesarios.
Crisis económica en Bolivia
Desde principios de 2023, Bolivia ha estado enfrentando una falta de liquidez de dólares, lo que ha llevado a que la divisa se venda casi al doble de su cotización oficial (6,96 bolivianos) en el mercado negro. Esta crisis también ha contribuido a la escasez de combustible.
Para mitigar esta situación, en noviembre de 2024, el Gobierno boliviano decidió eliminar los aranceles a las importaciones de medicamentos para enfermedades crónicas. Además, se formó un comité de control de precios en las farmacias, aunque hasta la fecha esta medida no se ha implementado.