Una columna de decenas de miles de palestinos cruzó este lunes 27 de enero de 2025 al norte de la Franja de Gaza. Estas personas llevaban consigo sus pertenencias, ya sea a pie o en vehículos, con el objetivo de reunirse con sus familias, buscar a sus desaparecidos o intentar encontrar sus casas en calles que han sido arrasadas e irreconocibles.
Las fuerzas israelíes abrieron, en la mañana de este lunes, los pasos del corredor que atraviesa la franja de este a oeste. Esto permitió que miles de personas, que habían estado esperando horas e incluso días, pudieran cruzar hacia sus ciudades tras más de 15 meses de desplazamiento forzado.
Según lo que atestiguó EFE, las familias comenzaron a cruzar por la calle Rachid, que va de norte a sur por el oeste de la franja, junto a la costa, desde las primeras horas de la mañana. En ese momento, no era evidente la presencia de tropas israelíes en la zona.
Regreso lleno de emociones
Las personas que cruzaban lo hacían con sonrisas, cantando y tocando instrumentos musicales. Muchos llevaban mochilas y maletas, mientras que otros arrastraban sus pertenencias con cuerdas atadas a sus cuerpos.
En su camino, se encontraban con el mar Mediterráneo a la izquierda y un campo arrasado a la derecha. Este último estaba lleno de montones de escombros, donde antes había calles y edificios, lo que hacía que la zona fuera difícilmente reconocible, incluso para aquellos que habían nacido allí.
Testimonios de esperanza
«Gaza es nuestro hogar, ha sido nuestra casa toda nuestra vida, donde nacimos, y seguirá siendo nuestra», dijo a EFE Fares Oweida, un joven de Beit Lahia, en el extremo norte de la franja. Su casa está destruida, pero se siente agradecido de poder regresar a ella. Esta situación le provoca una felicidad que no puede describir.
Una señora mayor también camina por la calle Rachid, que ahora se ha convertido en una avenida de lodo, junto a su hija. Hace 6 años, le realizaron una operación a corazón abierto. «El médico me dijo que no debía caminar o subir escaleras, pero llevo caminando 2 horas y no estoy cansada; siento como si alguien me llevara a cada paso, cada vez más cerca de mi casa», relató.
Fuente: EFE.
