El Gobierno de Bolivia ha dado a conocer una serie de actividades para conmemorar el Día Nacional del Acullico. Estas actividades incluirán conferencias, proyecciones de videos y un acto colectivo que se llevará a cabo el sábado en la plaza Murillo de La Paz. El viceministro de Coca y Desarrollo Integral, Mateo Mamani, subrayó la relevancia de la hoja de coca como un símbolo cultural y su reconocimiento por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Concentración en la plaza Murillo
Mamani, durante una rueda de prensa, mencionó que el evento principal será una concentración el sábado por la mañana en la plaza Murillo, donde se realizará un masticado colectivo junto a diversos sectores sociales. Afirmó que «la coca representa salud, alimentación y la fuerza de trabajo», y que por esta razón, la celebración principal estará precedida por seminarios y talleres organizados por la Vicepresidencia del Estado. Estos eventos se centrarán en «hablar del consumo y los beneficios de la hoja de coca».
Esta jornada se considera un «acto de reconocimiento y reivindicación de nuestra cultura ancestral». La hoja de coca es vista como «más que un recurso natural, es nuestra conexión con la Madre Tierra y la sabiduría ancestral», declaró el secretario general de la Vicepresidencia, Juan Carlos Alurralde.
Historia del Día Nacional del Acullico
El Día Nacional del Acullico fue establecido mediante una ley nacional que está vigente desde 2016. Esto ocurrió después de que, el 11 de enero de 2013, Bolivia regresara a la Convención Única de las Naciones Unidas sobre Estupefacientes de 1961, con la reserva de permitir el masticado de las hojas de coca en su estado natural dentro de su territorio.
Gestiones ante la OMS
Alurralde también destacó las gestiones de Bolivia para que la OMS y su comité de expertos en farmacodependencia inicien un proceso de revisión crítica. Este proceso busca que se reconozcan los beneficios de la planta en su estado natural y que su consumo no causa dependencia. En noviembre de 2022, la OMS comunicó al vicepresidente de Bolivia, David Choquehuanca, que había comenzado la revisión crítica de la clasificación de la hoja de coca, a cargo de un comité de expertos internacionales.
En junio de 2023, Bolivia lanzó una campaña internacional para difundir la importancia de la hoja de coca y lograr su desclasificación de la lista 1 de estupefacientes de la Convención de 1961. Esta propuesta cuenta con el respaldo de Colombia, que notificó su adhesión a esta iniciativa al secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, en mayo del mismo año. Alurralde indicó que se espera que el informe final del estudio esté disponible en Ginebra, Suiza, en octubre.
Usos de la hoja de coca
El consumo habitual de la hoja de coca incluye tanto el «acullico» o masticado como infusiones, que se utilizan para aliviar dolores e incluso el mal de altura. Bolivia es uno de los principales productores de este arbusto en el mundo. La hoja de coca está consagrada en la Constitución boliviana, vigente desde 2009, por sus usos tradicionales y medicinales. Sin embargo, una parte de esta producción se desvía hacia el narcotráfico para la fabricación de cocaína.
Superficie cultivable de coca
Desde 2017, Bolivia ha ampliado la superficie cultivable legalmente de coca, pasando de 12,000 a 22,000 hectáreas. La Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (Unodc) estableció en su último informe anual, publicado en noviembre, que los cultivos de coca disminuyeron un 2% en 2022, pasando a 29,900 hectáreas desde las 30,500 registradas en 2021.
