El Parlamento surcoreano aprobó el 27 de diciembre una moción para destituir a Han Duck-soo, quien se desempeñaba como primer ministro y presidente en funciones. Esta decisión se produce en medio de una crisis institucional que se desató tras la declaración de la ley marcial a principios de mes. La moción fue respaldada por 192 votos de la oposición, mientras que el gobernante Partido del Poder Popular (PPP) decidió boicotear la votación. Choi Sang-mok asumirá el cargo de manera provisional.
La inhabilitación de Han Duck-soo marca un hito, ya que es la primera vez en la historia democrática de Corea del Sur que se cesa a un jefe de Gobierno y Estado interino. Poco después de que se aprobara su destitución, el PPP presentó una solicitud de arbitraje sobre incompatibilidades jurisdiccionales. Además, solicitaron al Tribunal Constitucional que se anule el cese de Han.
Han Duck-soo, tras conocer la decisión, expresó: «Respeto la decisión de la Asamblea Nacional (Parlamento) y, para no aumentar la confusión y la incertidumbre, suspenderé mis funciones de acuerdo con las leyes pertinentes. Esperaré la rápida y juiciosa decisión del Tribunal Constitucional, que deberá ahora ratificar o no su inhabilitación». Choi, quien asume como nuevo presidente interino, aseguró que «el Gobierno hará todo lo posible para garantizar la estabilidad institucional».
Protestas en el Parlamento
Minutos antes de la votación, el presidente del Parlamento surcoreano, Woo Won-sik, anunció que la destitución de Han se haría efectiva si la moción era aprobada por mayoría simple. Esto provocó protestas por parte de los diputados del PPP, quienes argumentaron que, al tratarse de un presidente interino, se debía aplicar un baremo diferente: dos tercios del Parlamento.
El liberal Partido Democrático (PD), principal formación opositora que presentó la moción y a la que pertenece Woo, defendió que en el caso de Han debía usarse la misma métrica que se aplica para cesar a otros miembros del Gabinete: la mayoría simple. El PD presentó la moción para inhabilitar a Han después de que este afirmara que no aprobaría nombramientos de nuevos jueces para el Tribunal Constitucional hasta alcanzar un acuerdo entre los dos principales partidos sobre los tres magistrados vacantes.
El Tribunal Constitucional y su papel
El Tribunal Constitucional está evaluando la situación de Yoon Suk-yeol por su declaración de ley marcial del 3 de diciembre y tiene hasta el 11 de junio para ratificarla o no. Si no se cubren las tres vacantes en el tribunal, los seis magistrados actuales deberán aprobar unánimemente el cese para que este se haga efectivo.
El PD busca que la destitución de Yoon se resuelva pronto para poder convocar elecciones presidenciales anticipadas. En contraste, el PPP parece estar interesado en dilatar el proceso, ya que existe la posibilidad de una sentencia por violar la ley electoral contra Lee Jae-myung, líder del PD.
Incertidumbre en Corea del Sur
La destitución de Han genera una mayor incertidumbre en Corea del Sur. La oposición ha manifestado su intención de seguir presionando al Gobierno y al partido gobernante para renovar el Tribunal Constitucional y aprobar investigaciones especiales contra Yoon y su esposa. Además, continuarán presentando cuantas mociones sean necesarias hasta lograr sus objetivos.