Un hombre de 21 años, identificado como Jacinto Q.Q., ha sido condenado a 20 años de prisión por infanticidio en grado de tentativa. Esta condena se produce tras una brutal agresión a su hijastro de 2 años, quien sufrió múltiples lesiones y tuvo que ser atendido en terapia intensiva. Además, la madre del niño también ha sido sentenciada a 2 años de cárcel por violencia familiar y/o doméstica.
El hecho ocurrió el 24 de agosto de 2022 en una vivienda ubicada en Oruro. En ese día, el menor fue encontrado desmayado después de haber sido golpeado repetidamente por su padrastro.
Juicio y sentencia
Durante el juicio oral, el Ministerio Público presentó diversas pruebas que evidencian la participación de Jacinto Q.Q. en el crimen. Entre estas pruebas se incluye un certificado forense que establece 60 días de incapacidad para la víctima, así como el historial clínico que documenta las agresiones sufridas por el niño.
También se presentó un informe del investigador y un diagnóstico médico que detalla las graves lesiones del menor. Este diagnóstico incluye un traumatismo encéfalo craneal severo, hematoma subdural agudo en el hemisferio derecho, síndrome de hipertensión endocraniana, edema cerebral, neumonía, fractura de base de cráneo y síndrome de Kempe, que se refiere a niños maltratados. El fiscal litigante, Zulmer Villegas, informó sobre estos aspectos durante el juicio.
Además, se presentó un informe psicológico sobre la madre, que concluyó que el niño era agredido de manera constante. También se determinó que la madre no era apta para el cuidado del niño, ya que no denunció las agresiones que sufría.
La justicia finalmente impuso una pena de 20 años de cárcel para Jacinto Q.Q. por ser el autor del delito de infanticidio en grado de tentativa. Actualmente, se encuentra en detención preventiva en el penal de San Pedro. La madre fue hallada culpable y sentenciada a 2 años de cárcel por violencia familiar y/o doméstica.
Agresión que conmocionó a la comunidad
La mañana del 24 de agosto de 2022, la madre del niño salió al mercado alrededor de las 11:00 horas, dejando al menor bajo el cuidado de su pareja y sus suegros. Al regresar cerca de las 12:30, encontró a su hijo desmayado en una cama.
El padrastro, en ese momento, alegó que el niño se había caído de cabeza en la cocina y lo llevó a una de las habitaciones. La madre, al ver la situación, llevó a su hijo a la Pediatría del Hospital General San Juan de Dios.
El personal médico, al examinar al menor, notó que las múltiples lesiones no eran compatibles con una caída, sino que indicaban agresiones por parte de una tercera persona. Después de que el personal médico denunciara la situación, la Policía llevó a cabo una acción directa y aprehendió al padrastro.
Investigaciones y arresto
Se estableció que el padrastro había golpeado al niño en varias ocasiones utilizando un cable de celular, jalándole la oreja, con ramas de árbol e incluso por hacer sus necesidades biológicas.
Tras el incidente, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen, junto con la Fiscalía, iniciaron las investigaciones que resultaron en la aprehensión del padrastro. Este fue remitido al penal de San Pedro, donde permanece bajo detención preventiva.
