El debate en torno al presupuesto general del Estado para el año 2025 se está intensificando en la Asamblea Legislativa. El diputado de Comunidad Ciudadana, Alejandro Reyes, ha advertido que el Gobierno está buscando implementar un presupuesto que podría agravar la crisis económica que enfrenta el país. Por otro lado, el senador del Movimiento Al Socialismo, Santos Ramos, ha instado a sus colegas a aprobar el presupuesto para evitar lo que él considera irresponsabilidades.
La discusión se centra en las críticas que se han hecho sobre la falta de transparencia en la gestión del presupuesto y los elevados gastos que se destinan a la administración presidencial. Reyes ha señalado que “hoy estamos viendo cómo el próximo año, que es el último año de Luis Arce Catacora, no tiene sentido para una candidatura y menos una reelección”. Según él, esto lleva al Gobierno a “jugar del todo por destruir el país”, ejecutando un presupuesto que “claramente sigue endeudando” y “despilfarrando”.
El diputado también ha expresado su preocupación por las posibles confiscaciones que podrían derivarse de este presupuesto. Reyes indicó que aún no han tomado una decisión definitiva sobre la aprobación del presupuesto. Sin embargo, intuye que “no se va a aprobar porque aquí claramente están pasando por encima de muchas instituciones” y considera que es un presupuesto que ahondará la crisis en 2025.
Opiniones encontradas en la asamblea
Además, Reyes criticó la falta de cumplimiento con la redistribución del pacto fiscal y los resultados del censo. Por su parte, Santos Ramos ha manifestado que las observaciones al presupuesto son claras y ha instado a sus colegas a aprobarlo. “Eso ya es totalmente irresponsabilidad por parte de los asambleístas”, afirmó. Ramos argumenta que el presupuesto no solo beneficia al Gobierno, sino también a los sueldos de los asambleístas.
Ramos también hizo un llamado para que los diputados puedan sesionar y aprobar esta ley sin obstáculos. Uno de los cuestionamientos más destacados se refiere al excesivo presupuesto destinado a los gastos del Presidente, que asciende a más de 76 millones de bolivianos. En respuesta a estas críticas, Ramos defendió estos gastos como técnicamente evaluados y necesarios para cumplir con funciones oficiales.
Defensa del presupuesto presidencial
Aseguró que “la ley es clara: si no se aprueba por la Asamblea Legislativa, hay un tiempo limitado y esto se da por aprobado”. Reyes también mencionó que están tomando un crédito para cubrir necesidades hasta el 31 de diciembre de este año y calificó el presupuesto como “sin sentido”, sugiriendo que fue elaborado “por ni siquiera un estudiante de primer semestre”.