Más de 200 niños han perdido la vida en Líbano en menos de 2 meses debido a la escalada de violencia entre el grupo chií Hizbulá y el Ejército israelí, según informó este martes un portavoz del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) desde Ginebra.
El portavoz de UNICEF, James Elder, advirtió que, en los últimos 2 meses, más de 3 niños han muerto en promedio cada día en Líbano. Además, muchos más han resultado heridos y traumatizados por la violencia en la región.
En solo los últimos 10 días, al menos 36 niños han muerto a causa de los ataques. Entre ellos, se encuentran 7 menores de una misma familia que intentaban refugiarse en Monte Líbano, en el centro-oeste del país, tras huir de la violencia en el sur.
Similitudes con Gaza
Elder señaló que, aunque las muertes de niños en Líbano aún no han alcanzado el nivel de Gaza, existen «escalofriantes similitudes» para los menores en el país. El portavoz destacó que el paralelismo más preocupante es que el aumento en el número de niños asesinados no está generando una respuesta significativa por parte de quienes tienen influencia en la situación.
Afectación a infraestructuras esenciales
La reciente escalada de violencia también ha impactado en infraestructuras esenciales para los niños en Líbano, como las escuelas. Algunas de estas instituciones habían logrado reabrir, pero debido a los ataques del pasado fin de semana, se han visto obligadas a cerrar nuevamente.
Situación de la Fuerza Provisional
En la misma rueda de prensa, Andrea Tenenti, portavoz de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para el Líbano (FINUL), informó que esta misión ha sido blanco de al menos 162 ataques en el último año, de los cuales un tercio han ocurrido en los últimos 2 meses.
Tenenti mencionó que más de 20 miembros de las fuerzas de paz han resultado heridos hasta ahora, aunque afortunadamente ninguno de ellos corre peligro de muerte. El portavoz se dirigió a los periodistas acreditados ante la ONU en Ginebra a través de una rueda de prensa telemática desde Beirut.
Compromiso con la resolución 1701
El portavoz también advirtió que, a pesar de las numerosas amenazas que enfrentan los más de 10,000 efectivos de 50 países que componen esta misión, «no han abandonado» ninguna de sus 50 posiciones en territorio libanés. Además, «seguirán apoyando cualquier marco que acuerden las partes para poner fin a las hostilidades».
El general Aroldo Lázaro, oficial español que actualmente es comandante de FINUL, mantiene un canal de comunicación abierto con las partes involucradas. Continúa pidiendo a Israel y Líbano un nuevo compromiso con la Resolución 1701, que logró un alto el fuego entre ambos en 2006.
Fuente: EFE