Después de más de 14 días de bloqueos en las carreteras que conectan Cochabamba y Santa Cruz, la situación en la Estación de Autobuses Oruro se ha vuelto crítica. Este bloqueo ha llevado a la suspensión de viajes y a la necesidad de habilitar rutas alternas hacia otros destinos. Actualmente, la estación no logra cubrir ni el 30% de las salidas que normalmente se realizaban.
Impacto en los operadores de autobuses
Los operadores de autobuses están denunciando pérdidas significativas debido a esta situación. La administradora de la Estación de Autobuses Oruro, Soledad Nogales, expresó su preocupación por la posibilidad de no poder pagar a los trabajadores que están en planillas. Además, también se enfrenta a la dificultad de cumplir con las obligaciones financieras de la empresa.
“Estamos siendo afectados con estos días de bloqueos, estamos preocupados y alarmados porque no sabemos cómo pagar los sueldos de nuestros trabajadores, impuestos municipales, créditos bancarios. El transporte a Cochabamba está paralizado y a otros departamentos por rutas alternas, no estamos cubriendo ni el 30% de las salidas de buses debido a los bloqueos”, denunció Nogales.
Obligaciones de fin de año
La situación se complica aún más con la llegada de las obligaciones de fin de año, que habían sido previstas meses atrás. Este año ha sido particularmente difícil para la Estación de Autobuses, ya que en julio experimentaron una disminución del 20% en los viajes debido a la escasez de diésel. Esto resultó en que solo operaran al 80% de su capacidad, y ahora enfrentan la dura realidad de no poder alcanzar ni el 30% de las salidas.
“Queremos que se levante esta medida de presión en las carreteras, queremos libre transitabilidad en las carreteras para poder trabajar. Tenemos 85 operadores de transporte y en la Estación de Autobuses 70 trabajadores en planillas, ¿cómo vamos a pagar los sueldos?”, añadió la administradora.
Solicitud de acciones inmediatas
Desde la Administración de la estación se han solicitado acciones concretas para garantizar que las carreteras estén expeditas. Esto es crucial para que los operadores de autobuses puedan reanudar sus actividades, ya que su trabajo genera un movimiento económico significativo en otras áreas relacionadas con el transporte.