La comunidad de Candelaria, ubicada a 20 kilómetros de Concepción, enfrenta una grave crisis de agua. Los habitantes han señalado que el único pozo que abastecía a la localidad se ha secado, dejando a los residentes sin acceso al líquido vital.
Carlos Faldín, un residente afectado, compartió su angustia y comunicó a El Deber que el gobierno municipal ya no lleva agua desde hace tiempo. «La situación es crítica. No tenemos ni para tomar ni para cocinar, mucho menos para bañarnos o lavar», expresó Faldín. Este clamor se convierte en un llamado urgente a las autoridades e instituciones para que se solidaricen con la comunidad y les proporcionen el agua que tanto necesitan.
Declaración de desastre por sequía
Candelaria fue una de las primeras comunidades en declararse en desastre por sequía. A pesar de esta declaración, aún no ha recibido la ayuda necesaria. «Los hombres hacemos guardia todas las noches para evitar que el fuego entre a la comunidad», añadió Faldín, reflejando el temor y desamparo que se vive en la zona.
Impacto en los animales
La crisis de agua no solo afecta a los residentes, sino también a los animales de la región. Los atajados, que antes ofrecían agua para el ganado, ahora están contaminados con cenizas dejadas por los incendios. Esta situación agrava aún más la crisis que enfrenta la comunidad de Candelaria.
