El tiburón ballena es el pez más grande del mundo y actualmente se encuentra en peligro de extinción. Con el calentamiento de los océanos, esta especie se verá forzada a buscar nuevos hábitats. Estos nuevos espacios estarán atravesados por rutas marítimas muy transitadas, lo que incrementará el riesgo de colisiones con embarcaciones.
Riesgo de colisiones
Un estudio realizado por la Universidad de Southampton, en el Reino Unido, y publicado en la revista Nature Climate Change, indica que la posibilidad de que los tiburones ballena coexistan con grandes buques podría aumentar hasta 15,000 veces para finales de siglo, dependiendo del aumento de las temperaturas.
Estos animales son muy móviles y sensibles a los cambios de temperatura. Según datos recientes, son especialmente vulnerables a las colisiones con embarcaciones. A menudo, los tiburones y otros grandes animales marinos son golpeados y heridos, muchas veces de forma mortal, por los grandes buques que navegan por los océanos.
Estudio detallado
El equipo de investigación utilizó datos de seguimiento por satélite de 348 tiburones ballena que fueron marcados y rastreados entre 2005 y 2019. Combinando esta información con modelos climáticos globales, evaluaron la idoneidad actual y futura de su hábitat en todo el mundo.
Además, integraron estos modelos con el tráfico marítimo para analizar los posibles riesgos de conflicto entre humanos y tiburones. Algunos de los nuevos hábitats adecuados se superponen con rutas marítimas muy transitadas, como en la parte estadounidense del Pacífico Norte, la parte japonesa de los mares orientales de China y la parte sierraleonesa del Atlántico Norte, entre otros lugares.
Reducción de hábitats
En ciertas áreas, como la parte mexicana del Golfo de México, se ha observado una reducción en la coexistencia. Esto se debe a que los hábitats centrales se han desplazado hacia aguas más costeras, alejándose de las rutas marítimas del centro del Golfo.
Los modelos predicen que para el año 2100 se espera la pérdida de más del 50% de los hábitats adecuados en escenarios de altas emisiones de gases de efecto invernadero. Esto implicaría desplazamientos hacia los polos de más de 1,000 kilómetros.
Escenarios de emisiones
En un escenario de altas emisiones, las colisiones entre tiburones ballena y embarcaciones podrían aumentar drásticamente. La coexistencia entre puertos y grandes buques podría ser 15,000 veces mayor en comparación con la actualidad.
Sin embargo, si se opta por un desarrollo sostenible, alineado con el objetivo de no superar un aumento de 2 grados centígrados en la temperatura global, algunas áreas podrían experimentar un aumento en la disponibilidad de hábitat, especialmente en Europa.
Importancia de la acción
David Sims, investigador de Southampton y uno de los firmantes del estudio, comentó que los cambios que se prevén serán probablemente menos extremos si se logra frenar el calentamiento global y mitigar el cambio climático. Esto sugiere que incluso los impactos complejos y multifactoriales del cambio climático pueden ser aliviados en cierta medida mediante nuestras acciones.
El tiburón ballena puede alcanzar longitudes de hasta 12 metros y vivir hasta 150 años. A pesar de su nombre, se alimenta por filtración. Su boca, que puede medir hasta 1.2 metros de ancho, tiene dientes muy pequeños, lo que le impide morder o masticar.
Implicaciones para la población
La capacidad de estos tiburones para desplazarse a grandes distancias significa que la migración inducida por el clima y los peligros que enfrentan podrían tener consecuencias para toda la población. Esto incluye la reducción de las oportunidades de alimentación para los tiburones jóvenes.
Fuente: EFE