La propuesta del Presidente de Bolivia, Luis Arce, de someter a referendo temas como la reelección presidencial y la continuidad de los subsidios a los combustibles ha generado dudas sobre las repercusiones de esta iniciativa en la política y la economía del país.
Arce envió al órgano electoral cuatro preguntas sobre estos asuntos y la redistribución de los escaños parlamentarios. Sin embargo, el organismo desestimó la pregunta sobre los escaños y solicitó ajustar las referidas a los otros temas para garantizar claridad, precisión e imparcialidad. El Ejecutivo envió una nueva propuesta, a la espera del pronunciamiento del Tribunal Constitucional sobre la legalidad de las preguntas.
Criticas y opiniones sobre la propuesta
La iniciativa ha sido criticada por opositores, el exmandatario Evo Morales y expertos de distintas áreas, quienes consideran que es inconstitucional y busca evadir el control del Legislativo. Además, argumentan que la consulta sobre la reelección está relacionada con la disputa entre Arce y Morales, y que la cuestión de los combustibles no resolverá la crisis económica del país.
La analista política Erika Brockmann señala que la propuesta de Arce es improvisada y desesperada, políticamente hábil dadas las circunstancias, pero de corta duración en términos de sus efectos. Según Brockmann, la disputa interna en el oficialismo tiene un impacto desordenador en la política y las instituciones, y considera que el referendo busca cerrar definitivamente la posibilidad de reelección de Morales.
Transición política y resistencia
Brockmann destaca que Bolivia está viviendo una compleja transición política del post evismo. Si la reelección es rechazada, se espera resistencia por parte del bloque de poder evista, conformado principalmente por los cocaleros del centro del país, quienes tienen capacidad para bloquear la principal carretera boliviana.
Además, existe la duda sobre si los resultados del referendo serán respetados, considerando que en 2016 una consulta negó a Morales la reelección, pero pudo postularse nuevamente en 2019 gracias a un fallo del Tribunal Constitucional.
Consulta sobre subsidios a los combustibles
La consulta sobre la eliminación de los subsidios internos a la gasolina y el diésel, que mantienen los precios bajos desde hace 19 años, busca resolver los efectos negativos en la economía nacional, como la persistente escasez de dólares desde 2023.
El analista económico Gonzalo Chávez considera que esta consulta es una jugada política y una simplificación que no aborda la complejidad económica y técnica del tema de la subvención. Chávez sugiere un desarme parcial y gradual de los subsidios, junto con una reforma estructural que incluya recortar el gasto público, fomentar las exportaciones y flexibilizar el tipo de cambio.
Retos económicos y agotamiento del modelo
Chávez cuestiona el argumento gubernamental de destinar el ahorro generado por la eliminación de los subsidios a la inversión pública, ya que esto supone mantener el gasto. Además, señala que cualquier resultado de la consulta generará sectores insatisfechos, por lo que el referendo solo pospondrá los problemas.
El analista también critica que el Gobierno no reconozca que la falta de dólares y el déficit público son síntomas del agotamiento estructural del modelo económico de Arce, que otorga protagonismo al Estado.
