El presidente de Argentina, Javier Milei, anunció recientemente que el gobierno está trabajando en una modificación de la Ley de Seguridad Interior para que las Fuerzas Armadas intervengan en «situaciones excepcionales» sin necesidad de declarar un estado de sitio. Esta medida busca combatir la presencia de organizaciones narcotraficantes, terroristas y del crimen organizado local en el país.
En un encuentro con la cúpula militar argentina, Milei explicó que la modificación de la ley busca adaptar el papel de las Fuerzas Armadas a los desafíos actuales. Hasta ahora, su función principal ha sido proteger al país de amenazas externas. Sin embargo, en un mundo donde los conflictos entre ejércitos regulares son menos frecuentes y ciertos Estados tienen vínculos con grupos delictivos, es necesario replantear estos paradigmas.
La Ley de Seguridad vigente desde 1992 establece que el uso de las Fuerzas Armadas para la seguridad interior requiere la declaración de un estado de sitio. Sin embargo, la propuesta de Milei busca permitir su intervención en casos excepcionales, a criterio del Presidente de la Nación y cuando las fuerzas policiales resulten ineficientes.
Compromiso con las Fuerzas Armadas
En el mismo encuentro, el presidente argentino se comprometió a recomponer los salarios de los miembros de las Fuerzas Armadas utilizando recursos genuinos. Además, se mencionó el tratamiento legislativo en el Senado para los ascensos militares en todos los rangos.
Milei reconoció la deuda histórica que el país tiene con sus Fuerzas Armadas y afirmó que hará todos los esfuerzos necesarios para ir recomponiendo sus salarios a medida que se estabilice la situación económica.
El acto concluyó con un brindis en lugar de la tradicional cena de camaradería militar. Sin embargo, se notó la ausencia de la vicepresidente Victoria Villarruel en el evento.
