El departamento de Santa Cruz ha tomado una importante medida para fortalecer la protección y conservación de la Reserva Forestal «El Choré». Mediante el Decreto Supremo 5202, se ha declarado este espacio como Parque Nacional y Área Natural de Manejo Integrado, con el objetivo de preservar su biodiversidad y recursos naturales.
Restricciones y regulaciones para la conservación
Con el fin de garantizar la integridad del parque, se han establecido una serie de restricciones y regulaciones en las 770.584 hectáreas que abarcan tanto el Parque Nacional como el Área Natural de Manejo Integrado. El artículo 6 del decreto prohíbe de manera tajante actividades como la explotación forestal, la caza y la pesca deportivas o comerciales, la minería, y la construcción de infraestructura y caminos.
Además, se prohíbe cualquier otra actividad que pueda poner en peligro la conservación del área y sus recursos naturales.
Los derechos de aprovechamiento forestal previamente autorizados por la Autoridad de Bosques y Tierras (ABT) deberán ajustarse a los lineamientos establecidos en el Plan de Manejo del Área Natural de Manejo Integrado «El Choré». Esta disposición asegura que las actividades permitidas se realicen en consonancia con las nuevas regulaciones para proteger el ecosistema.
Excepciones bajo permisos sustentables
A pesar de las restricciones, el Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap) podrá otorgar permisos para el uso y aprovechamiento sustentable de los recursos naturales, siempre y cuando estén alineados con el Plan de Manejo del Área y las políticas del Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP). Esto garantiza el respeto a los derechos colectivos según la normativa vigente.
Reforzando la protección y conservación
Esta acción declaratoria responde a la necesidad de reforzar las medidas de protección, conservación y restauración de los bosques, tierras, biodiversidad y funciones ambientales de la región. Además, busca abordar desafíos previos y mejorar la gestión de la reserva.
Con la incorporación de «El Choré» al Sistema Nacional de Áreas Protegidas (SNAP) y bajo la administración del Sernap, se espera una gestión más eficiente y orientada hacia la conservación.