En la ciudad de Cochabamba se llevó a cabo un simulacro de respuesta ante un sismo, en el cual participaron miembros de las Fuerzas Armadas, la Policía Boliviana, la Cruz Roja, SAR-FAB y Bomberos. El objetivo principal de esta actividad fue evaluar las capacidades en recursos humanos y logística para hacer frente a eventos sísmicos.
El ministro de Defensa, Edmundo Novillo, calificó la experiencia como exitosa y destacó la importancia de la prevención como política de Estado. Novillo recordó los daños causados por el terremoto ocurrido en 1998 en los municipios de Aiquile, Totora y Mizque, y resaltó la necesidad de fortalecer las medidas preventivas.
Helicóptero F-9: una herramienta clave en la evaluación del desastre
Durante el simulacro, se destacó la labor del helicóptero F-9, el cual realizó un vuelo de reconocimiento aéreo para evaluar la situación y magnitud del desastre producido por el sismo. La información recopilada fue transmitida a las áreas operativas terrestres para una acción coordinada.
Fortaleciendo la preparación ante eventos sísmicos futuros
Cochabamba ha sido considerada epicentro de réplicas sísmicas en la región, por lo que es fundamental mejorar la preparación ante posibles eventos sísmicos futuros. Durante el simulacro se evaluaron las capacidades en cuanto a recursos humanos, logística, medios, planes y capacidad de coordinación.
Este ejercicio permitió identificar áreas de mejora y fortalecer la capacidad de respuesta ante desastres naturales. El ministro Novillo enfatizó la importancia de trabajar en la prevención como política de Estado y destacó la necesidad de evaluar constantemente las capacidades en recursos humanos y logística.
