El Defensor del Pueblo, Pedro Callisaya Aro, junto con autoridades del sistema penitenciario, presentaron el programa «Reeducar para no dañar» el martes 30 de julio. Este programa está dirigido a hombres privados de libertad por violencia familiar y tiene como objetivo principal promover la intervención psicoterapéutica para que los agresores asuman responsabilidad y encuentren motivación para cambiar su conducta violenta.
La propuesta busca romper el ciclo de violencia en el entorno familiar y se prevé su implementación en todos los centros penitenciarios del país. Según cifras oficiales, diariamente un promedio de 102 mujeres son víctimas de violencia familiar en Bolivia, por lo que es crucial intervenir terapéuticamente con los hombres violentos para detener la reproducción de la violencia.
Participación obligatoria para hombres con sentencia ejecutoriada
El programa cuenta con respaldo estatal y se espera que los hombres con sentencia ejecutoriada por violencia familiar participen obligatoriamente. Por otro lado, aquellos detenidos preventivamente podrán unirse voluntariamente al programa. Esta iniciativa busca sensibilizar a los privados de libertad sobre la gravedad de la violencia familiar y fomentar una cultura de respeto e igualdad entre géneros.
Seguimiento y evaluación del impacto del programa
Además, se prevén seguimientos posteriores a los participantes para evaluar el impacto del programa en la reducción de casos de violencia familiar en el país. Durante la presentación del programa, el Director Nacional de Seguridad Penitenciaria, coronel Rodolfo Machicado, destacó la labor fundamental realizada por la Defensoría del Pueblo para fortalecer la lucha contra la violencia. Como parte de esta presentación, se entregó un stock de material para su uso con la población privada de libertad a nivel nacional.