Una soldado, biológicamente varón pero declarado transgénero, ha presentado una demanda contra el Ejército de España por discriminación. La controversia surge debido a que no se le permitió utilizar los baños designados para mujeres. Este caso se enmarca en la aplicación de la Ley Trans en España, la cual ha generado polémicas en diversos ámbitos.
Francisco Javier L.G., una soldado con características físicas masculinas como barba y genitales masculinos, pero registrada como mujer según la normativa vigente, se encuentra en medio de un litigio con el Ministerio de Defensa. El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía ha iniciado acciones legales contra el cuartel y el Ministerio, otorgándoles cinco días para presentar documentación que aclare la situación.
Presunta vulneración de derechos fundamentales
El abogado de la demandante argumenta que se estaría incurriendo en una presunta «vulneración de derechos fundamentales y libertades públicas» al restringirle el acceso a los baños designados para mujeres. La Ley Trans establece la prohibición de cualquier forma de discriminación laboral, lo cual es central en la defensa del soldado transgénero. Limitar su acceso a las instalaciones del cuartel sería considerado como una vulneración a las garantías de igualdad de trato.
Solicitud de tutela de derechos y compensación económica
El abogado solicita la tutela de los derechos del demandante y una indemnización por daños y perjuicios valorada en 50.000 euros. La denuncia se ampara también en el artículo 14 de la Constitución española, que garantiza el derecho a la igualdad de trato y prohíbe cualquier tipo de discriminación por razón de nacimiento, raza, sexo u otras condiciones personales o sociales.
