El informe publicado por la Federación Internacional de Periodistas (FIP) revela que el año pasado fue uno de los más peligrosos para los profesionales de los medios de comunicación. En total, ciento veintinueve periodistas perdieron la vida, la mayoría de ellos mientras cubrían la guerra en Gaza.
Antes del inicio del conflicto en octubre de 2023, ya habían fallecido veinte periodistas. Esta cifra contrasta con los sesenta y ocho del mismo periodo del año anterior y los cuarenta y cinco entre enero y octubre de 2021. Sin embargo, después del mortífero ataque de Hamás en el sur de Israel el 7 de octubre, seguido de la represión del Ejército de Israel en la Franja de Gaza, el número de muertos en 2023 alcanzó niveles sin precedentes.
Asia-Pacífico: Otra región peligrosa para los periodistas
Después de Oriente Medio, la región más peligrosa para los periodistas fue Asia-Pacífico, donde doce personas perdieron la vida en países como Pakistán, Filipinas, India, Afganistán, China y Bangladesh.
América: Disminución de delitos contra periodistas
En América fallecieron once reporteros, según el informe de la FIP. Sin embargo, se destacó una considerable disminución de delitos contra los periodistas en Latinoamérica y el Caribe en comparación con las cifras registradas en 2022, aunque no se detuvieron por completo. En México, considerado el peor país para los periodistas en ausencia de conflictos armados, siete profesionales de la información perdieron la vida en circunstancias violentas, lo cual representa una reducción significativa en comparación con el año anterior. No obstante, la tasa de impunidad en México sigue siendo una de las más altas de la región, con el 95% de los ataques mortales a periodistas aún sin resolver.
África y Europa también sufren pérdidas
En África fallecieron ocho periodistas en países como Camerún, Ruanda, Lesoto, Sudán, Mali, Somalia y Mozambique. En Europa, cuatro periodistas perdieron la vida, tres de ellos mientras cubrían la guerra en Ucrania y uno en Albania.
Llamado a proteger a los periodistas
Ante esta alarmante situación, el secretario general de la FIP hizo un llamado a nivel internacional para establecer un instrumento legal que obligue a los Estados a proteger a los periodistas y garantizar su seguridad en el ejercicio de su labor.
/ APC
