La calificadora Moody`s ha decidido rebajar la calificación crediticia de Bolivia de «Caa1» a «Caa3». Esta acción se debe a la preocupación por el riesgo de incumplimiento en las obligaciones de deuda externa y la escasez de divisas para importaciones. El Presidente Luis Arce ha atribuido esta decisión a motivos políticos, señalando la falta de aprobación de créditos en la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) por parte de legisladores «evistas» y la oposición.
El Presidente Arce ha expresado que Bolivia continúa pagando su deuda externa sin interrupciones, cuestionando las razones detrás de la disminución en la calificación crediticia. Destacó que la negativa en la aprobación de créditos legislativos ha influido en esta situación, generando preocupación en el ámbito económico del país.
Críticas al enfoque de Moody`s
El Ministerio de Economía emitió un comunicado criticando a Moody`s por centrarse únicamente en las presiones de liquidez en moneda extranjera, sin considerar las políticas económicas implementadas para mantener la estabilidad y el crecimiento económico.
Bloqueo legislativo y tensiones políticas
En el Legislativo boliviano, más de 900 millones de dólares permanecían paralizados hasta principios de abril debido a un acuerdo entre legisladores «evistas» y partidos opositores. Este bloqueo se relaciona con demandas legislativas que condicionan la liberación de fondos a ciertas leyes, lo que ha generado tensiones políticas y económicas en el país andino.
Consecuencias del bloqueo legislativo
El Presidente Arce ha alertado sobre las consecuencias directas de estos bloqueos legislativos, como el retraso en proyectos clave para el desarrollo del país. La postergación del crédito destinado a la ampliación del sistema Mi Teleférico pone en riesgo importantes inversiones públicas, afectando potencialmente el crecimiento económico y la infraestructura nacional.
Desafíos financieros y polarización política
Según declaraciones del mandatario, actualmente Bolivia enfrenta desafíos financieros debido al agotamiento de recursos como el gas natural, lo que ha llevado al gobierno a buscar nuevas fuentes energéticas. La falta de consenso en la Asamblea Legislativa respecto a préstamos y proyectos clave refleja una polarización política que podría impactar negativamente en la economía y el bienestar social del país.