El presidente del Tribunal Disciplinario de la Policía, Marcelo Flores, ha expresado su preocupación por el creciente número de faltas disciplinarias en la institución del «verde olivo». Durante los últimos años, se ha observado una tendencia ascendente en este tipo de conductas, lo que ha llevado a Flores a solicitar un mayor control por parte de los superiores.
En el marco de la conmemoración del XIII aniversario del Sistema Disciplinario de la Policía Boliviana, el presidente del tribunal lamentó la situación disciplinaria en la institución y compartió cifras preocupantes. Durante el año 2021 se registraron 308 casos de indisciplina, mientras que en 2022 la cifra aumentó a 411 casos. En 2023, se reportaron 800 casos y en el presente trimestre ya se han registrado 165 casos. Estas cifras reflejan una tendencia ascendente en la comisión de faltas disciplinarias, lo cual es motivo de gran preocupación y debe llevarnos a reflexionar sobre las causas y posibles soluciones.
Un llamado a la prevención
Ante este contexto, el presidente del tribunal se dirigió a los comandantes y jefes policiales para instarlos a prevenir actos de indisciplina dentro de la institución. Flores les pidió que estén disponibles las 24 horas del día para supervisar a sus subalternos, en lugar de limitarse a horarios de oficina. Además, hizo hincapié en la importancia de evitar casos de conducción bajo influencia alcohólica, destacando que es responsabilidad de cada uno de ellos supervisar y controlar a su personal.
Consecuencias de las faltas disciplinarias
Según informó Flores, desde el año 2021 hasta el presente año 2024, se han registrado más de 450 bajas definitivas en la Policía Boliviana. Ante esta situación, el presidente del tribunal hizo un llamado a sus camaradas a ajustar su conducta de acuerdo con la Ley 101 de la Policía, con el objetivo de evitar sanciones y preservar la integridad y el prestigio de la institución.