La Policía Boliviana y la Autoridad de Regulación y Fiscalización de Telecomunicaciones y Transporte (ATT) han incrementado los controles en las terminales terrestres de La Paz y El Alto, debido a los alarmantes casos de dopaje registrados en las carreteras del país. Estas medidas se toman en respuesta a más de diez incidentes reportados, en su mayoría afectando a personas de la tercera edad que han sido drogadas durante sus viajes desde Oruro a La Paz.
«Estaremos realizando controles constantes en colaboración con la Policía Boliviana y la administración de la terminal. Por esta razón, recomendamos a las personas que no acepten nada de terceras personas», declaró Noemy Jiménez, auxiliar de transportes de la ATT.
Según las autoridades, desde el año pasado se han registrado alrededor de diez casos similares, principalmente afectando a mujeres mayores. Estos incidentes han generado preocupación en la población y han llevado a un fortalecimiento significativo de los controles para garantizar la seguridad de los pasajeros durante sus viajes interdepartamentales.
Operativos de control bidireccionales para prevenir casos de dopaje
Los operativos de control se llevarán a cabo en ambas direcciones, ya que se ha coordinado con la administración de la terminal de Oruro. Esto permitirá que las personas ya no estén expuestas a este tipo de situaciones extremas. Nuestro personal está informando a los pasajeros que no acepten absolutamente nada, ninguna bebida, para evitar ser dopados», informó Américo Gemio, administrador de la Terminal de Buses de La Paz.
El caso más reciente ocurrió el pasado miércoles, cuando una comerciante adulta mayor recibió un jugo y quedó «totalmente dormida», siendo trasladada a un hospital de La Paz para su recuperación.
«Estamos muy preocupados por esta situación y recomendamos a las personas que no acepten ningún ofrecimiento de terceras personas», enfatizó Gemio.