Recientemente, dos profesionales de la salud que trabajaban en el Hospital Oruro-Corea fueron apartados de sus cargos debido a acusaciones de acoso sexual. La dirección del Complejo Hospitalario «San Juan de Dios» ha negado cualquier tipo de conciliación con los involucrados en este caso.
La denuncia pública fue realizada por la madre de una de las residentes del hospital, quien afirmó que su hija había sido acosada por médicos del Servicio de Ginecología y Obstetricia. Además, denunció que los galenos tomaron represalias contra su hija y otras residentes, afectando sus calificaciones y su estadía en la residencia.
Acciones tomadas por la dirección del hospital
Ante la gravedad de las acusaciones, la dirección del Complejo Hospitalario «San Juan de Dios» presentó una denuncia ante el Ministerio Público. Sin embargo, esta fue inicialmente rechazada debido a algunas observaciones. Posteriormente, se volvió a presentar la denuncia y se acordó brindar garantías a las residentes durante la investigación.
Como medida interna, se decidió cambiar a las autoridades responsables del servicio y de los residentes por dos profesionales mujeres. Además, se determinó que los médicos involucrados debían ser alejados de la institución, aunque uno de ellos estaba de vacaciones y al otro se le otorgaron vacaciones. La dirección del hospital enfatizó que estas decisiones se tomaron en base a la presunción de inocencia hasta que se demuestre lo contrario.
Informe presentado al Ministerio Público
El Servicio Departamental de Salud (Sedes) solicitó un informe al hospital, el cual fue presentado al Ministerio Público. A los pocos días, se recibió un memorándum de agradecimiento de servicio para dos de los médicos involucrados. Cabe destacar que ambos médicos ya no forman parte de la institución, mientras que el tercer profesional acusado se encontraba de vacaciones en el momento de la denuncia y al regresar se tomaron las medidas correspondientes.
Repercusiones en las calificaciones de las residentes
En medio de este caso, surgió otro problema relacionado con las calificaciones de una de las residentes que denunció el acoso. Los familiares consideraron que la baja calificación obtenida por la residente fue una venganza debido a la denuncia. Ante esto, la dirección del hospital invitó a docentes externos para que tomaran el examen y estos también reprobaron a la residente. El informe fue enviado al Comité Regional de Integración Docente Asistencial e Investigación (Cridai) Oruro.
El director del hospital lamentó que el caso esté llegando a extremos y que se esté interpretando la situación desde otro punto de vista. Afirmó que no dará marcha atrás en el caso de la baja calificación de la residente, ya que todo se basa en función de la nota y no en las acusaciones de acoso.
