La población indígena del pueblo Weenhayek, ubicado en las orillas del río Pilcomayo en Tarija, se encuentra esperanzada ante el posible levantamiento de la veda pesquera a mediados o fines de abril. Este levantamiento se debe a la migración de cardúmenes de sábalos «punteros» aguas arriba, los cuales representan una importante fuente de ingreso y alimentación para la comunidad.
Antonio Tato, exautoridad de Weenhayek, expresó su optimismo al afirmar: «Esperamos que se levante la veda a mediados o fines de abril, ya que la pesca del sábalo es nuestra única fuente de ingreso». La ansiedad por retomar la actividad pesquera ha crecido entre los Weenhayeks, ya que esta constituye su principal sustento económico y alimenticio.
Posible favorable temporada de pesca comercial
Evelio Téllez, director de la Unidad de Biodiversidad y Codefauna de la Gobernación de Tarija, señaló que este año podría ser propicio para la pesca comercial debido al arribo de cardúmenes de sábalo. Se prevé realizar una inspección conjunta para evaluar si es factible suspender la veda pesquera, una vez que se haya verificado el estado natural de los peces.
En un monitoreo reciente en la parte baja del Pilcomayo, se constató la llegada de los peces «punteros» en D`Orbigny y Esmeralda, dirigiéndose hacia El Angosto para completar su etapa de crecimiento. Cada año, la Gobernación tarijeña levanta la veda en mayo mediante una Resolución Administrativa.
Una bendición divina para los pobladores de Weenhayek
Los habitantes del pueblo Weenhayek consideran el arribo de los cardúmenes como una bendición divina, especialmente en un contexto de sequía que ha dificultado sus actividades agrícolas. La pesca de sábalos no solo les brinda ingresos económicos, sino también una fuente de alimentación fundamental para su comunidad.
