El procurador César Siles busca conciliar para evitar una demanda internacional. Según Siles, el cobro se debe a un lote de dosis que nunca llegó, de acuerdo a un cronograma establecido.
La Procuraduría General de Bolivia está tomando medidas activas para evitar una posible demanda internacional por parte de Rusia. Según Siles, «nos están pretendiendo demandar por la compra y suministro de vacunas rusas».
Contrato entre Bolivia y Rusia contemplaba la compra de 5,2 millones de dosis
En 2020, el Presidente Luis Arce firmó un contrato con Rusia para la compra de 5,2 millones de dosis de la vacuna Sputnik V. Sin embargo, hasta el momento solo se ha recibido la primera entrega, quedando pendientes otros tres lotes que suman un total de 1.365.000 dosis no entregadas según lo acordado. Estas dosis debían ser entregadas en 2021.
Posibilidades de resolver la controversia antes de recurrir al arbitraje internacional
A pesar del conflicto actual, se vislumbran posibilidades para resolver la controversia antes de recurrir al arbitraje internacional, manteniendo las relaciones comerciales con Rusia. Las negociaciones con el Kremlin están abiertas y se espera encontrar una solución que evite mayores repercusiones legales y económicas.
La Central de Abastecimiento y Suministros de Salud involucrada en el reclamo
El procurador también señaló que la Central de Abastecimiento y Suministros de Salud (Ceass), proveedor oficial del Estado boliviano, está involucrada en el reclamo por las vacunas no entregadas. La falta de cumplimiento en los plazos establecidos ha generado tensiones entre ambas naciones, buscando una solución que evite mayores repercusiones legales y económicas.
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