Cinco personas mayores se reúnen en una fila frente a una panadería estatal en La Habana, esperando desde hace más de cinco horas por el preciado producto en tiempos de crisis.
El pan, un alimento básico en la dieta cubana, se prevé escaso durante marzo debido a dificultades en los embarques planificados desde países aliados. Esta situación se suma a la importación del 80% de los alimentos consumidos en Cuba, generando preocupación entre la población.
Impacto en la Población
La falta de pan se une a la escasez de leche para menores de siete años, y a la irregular disponibilidad de otros productos básicos como arroz, café y aceite. Los cubanos se enfrentan a la realidad de un salario estatal que apenas supera los 25 dólares mensuales, agravando la situación.

Alternativas y Controversias
Ante la crisis, han surgido micro, pequeñas y medianas empresas dedicadas al comercio minorista de alimentos, siendo criticadas por algunos sectores. Establecimientos privados ofrecen productos a precios elevados, representando un desafío para aquellos con bajos ingresos.
Medidas del Gobierno y Perspectivas Económicas
El Gobierno cubano ha anunciado un plan de ajuste para hacer frente a la crisis, incluyendo incrementos en precios de combustibles y servicios básicos. A pesar de la contracción económica y el déficit público, aún no se han implementado medidas concretas para aliviar la situación de la población.

Fuente EFE.