En medio de una semana marcada por el debate parlamentario de la «ley ómnibus», proyecto estrella del Ejecutivo argentino, muchos colectivos que sostienen comedores sociales se manifestaron este jueves ante supermercados del país contra los escasos recursos de los que disponen desde que Javier Milei es presidente.
Argentina cerró 2023 con un índice de precios al consumidor (IPC) del 211,4 %, la inflación más alta del mundo, por detrás del Líbano y Venezuela. Sin embargo, el sector «alimentos y bebidas no alcohólicas» superó con creces esa cifra alcanzando un 251,3 %.
Además, más del 40 % de la población se encuentra en situación de pobreza. Por lo tanto, la asistencia social y el auxilio en este tipo de espacios se vuelven mucho más importantes.
Protesta pacífica frente a supermercado Coto
Gabriela Belloni, referente de la agrupación Somos Barrios de Pie-Tres de Febrero (nombre de una municipalidad en la provincia de Buenos Aires), lideró este jueves una protesta pacífica frente al supermercado Coto, una de las empresas distribuidoras alimentarias más importantes en Argentina.
Pedidos a empresas privadas ante falta respuesta gubernamental
La activista explicó a EFE que hoy es «imposible» sostener a tantas familias y no pueden seguir abriendo las puertas de los comedores. Al no tener respuesta por parte del Gobierno nacional, no les queda otra opción que pedir donaciones a empresas privadas como esta.
Simbolismo de la elección del lugar de protesta
El lugar elegido para estas concentraciones no es casualidad. Aparte de exponer sus demandas ante el Ministerio de Capital Humano -responsable por la asistencia social-, otros grupos acudieron a las puertas de tiendas como esta cadena de supermercados. Esta imagen es muy simbólica, ya que en 2001, en medio de una terrible crisis económica que azotó al país, hubo diversos saqueos en sus sedes.
Petitorio entregado a supermercados y pedido de atención gubernamental
Amalia Suárez, responsable de la acción social del Movimiento Evita -una agrupación política de ideología peronista, nacional, popular y revolucionaria-, expuso a EFE que su único objetivo es hacer escuchar las críticas de los afectados.
«Estamos aquí para entregar un petitorio a todos los supermercados, también pidiendo que la ministra (de Capital Humano) Sandra Pettovello nos escuche y conozca la crisis que estamos atravesando en los barrios. No llegan alimentos y no se está ejecutando el presupuesto nacional destinado a esto. No es que no haya dinero, sino que el presupuesto está inmovilizado», declaró.
Auditoría a comedores registrados genera preocupación
El Ejecutivo de Milei anunció recientemente una auditoría a los comedores registrados para luchar contra la «discrecionalidad, compras poco claras y cuestiones que estamos dispuestos a cambiar», explicó el portavoz presidencial Manuel Adorni días atrás.
«Abrirá un método innovador para asegurar que las ayudas lleguen a quienes correspondan», agregó sin especificar más detalles. Sin embargo, reiteró la lucha del Gobierno por evitar «negocios con la pobreza».
Críticas al Gobierno por falta de respuesta ante emergencia alimentaria
En ese sentido, Román Buccino, miembro del secretariado general de la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP), fue bastante contundente hoy sobre la postura del Ejecutivo.
«Hay un relato de que ellos (el Gobierno) quieren terminar con el intermediario en los repartos, pero lo único que están logrando es dejar sin nada para comer a muchas familias argentinas», dijo a EFE y explicó que no existe una política alimentaria desde la asunción de Milei, algo que nunca había pasado en Argentina.
Ministra promete atención individualizada
Por su parte, Pettovello se acercó para hablar con quienes marcharon hasta las puertas del ministerio.
«¿Tiene hambre la gente? Yo voy a atender uno por uno a las personas que tienen hambre, no a los referentes. Voy a anotar su nombre y su DNI (documento nacional de identidad), y recibirán ayuda individualmente», afirmó la ministra. Además, agregó que en su gestión solucionará los problemas de las personas sin dejarse extorsionar por los «gerentes de la pobreza que manipulan la voluntad de aquellos más necesitados».
Fuente EFE
