El glioblastoma es un tumor cerebral considerado uno de los más letales y difíciles de tratar. Ahora, un equipo científico ha llevado a cabo un pequeño ensayo clínico con 41 pacientes que padecen cáncer recurrente, utilizando una nueva terapia génica capaz de prolongar la supervivencia.
Estos resultados son aún preliminares, ya que se trata de un ensayo en fase 1. Sin embargo, los responsables del estudio los califican como «emocionantes» y afirman que brindan esperanzas para futuros avances en el tratamiento de este tipo de cáncer, el cual es muy resistente a las terapias convencionales y tiene una tasa de supervivencia inferior a los 10 meses en casos de recidiva.
Nueva terapia génica mediada por virus
Los detalles sobre la seguridad y eficacia preliminar de esta nueva terapia génica mediada por un virus se publican en la revista Nature. Detrás del estudio se encuentran científicos del Brigham and Women`s Hospital (Boston).
Transformando el entorno inmunológico
El glioblastoma tiene un efecto agresivo debido, en parte, al entorno inmunosupresor que rodea al tumor. Este entorno impide que el sistema inmunitario penetre y ataque al tumor, lo cual permite su crecimiento. Así lo explica Antonio Chiocca, director del departamento de Neurocirugía del hospital mencionado.
Un virus oncolítico para estimular la respuesta inmunitaria
Con el objetivo de convertir este entorno en uno propicio para una respuesta inmunitaria, los investigadores diseñaron un nuevo virus oncolítico capaz de infectar células cancerosas y estimular una respuesta antitumoral por parte del sistema inmunitario. Este «novedoso enfoque» logró prolongar la supervivencia de los pacientes.
Evaluación de seguridad y eficacia preliminar
El ensayo clínico de fase 1 evaluó la seguridad de un virus oncolítico llamado CAN-3110, el cual ahora ha sido licenciado a la empresa Candel Therapeutics. Este virus pertenece a la familia del herpes simple y es utilizado en una terapia aprobada para el tratamiento del melanoma metastásico. Los investigadores diseñaron una versión modificada de este virus que contiene un gen específico (ICP34.5) y que está «programada» genéticamente para no atacar las células cerebrales sanas.
Prometedoras respuestas inmunológicas
En general, el ensayo demostró ser seguro en los 41 pacientes con gliomas de alto grado, siendo 32 de ellos con glioblastoma recurrente. Los eventos adversos más graves registrados fueron convulsiones en dos participantes.
Aumento en diversidad celular e inflamación tumoral
Los voluntarios que presentaban anticuerpos preexistentes contra el virus del herpes simple tipo 1 (VHS-1), lo cual representaba alrededor del 66% de los participantes, tuvieron una media de supervivencia global de 14.2 meses.
Prometedoras conclusiones sobre la terapia génica
Los científicos observaron marcadores que indican varios cambios en el microambiente tumoral asociados con la activación del sistema inmunitario. La hipótesis planteada es que la presencia de anticuerpos contra el VHS-1 provocó una respuesta inmunitaria rápida al virus, lo cual atrajo más células inmunitarias hacia el tumor y aumentó los niveles de inflamación en el microambiente tumoral. Además, se constató un aumento en la diversidad del repertorio de células T, lo cual sugiere que el virus induce una amplia respuesta inmunitaria.
Prometedor futuro para la terapia génica
«Estudios como este demuestran lo prometedor que es el uso de terapia génica, la cual modifica la información genética, para tratar enfermedades intratables», concluyen los autores.
Fuente: EFE