Elías Colque, Ejecutivo de la Central Obrera Departamental de Oruro (COD), anunció que las organizaciones sociales del departamento de Oruro han tomado la decisión de declararse en estado de alerta para salvaguardar la democracia y evitar un «nuevo golpe de Estado, similar al ocurrido en 2019». Esta determinación surge después de un análisis de la coyuntura política a nivel nacional en el que se destaca el respaldo al Presidente del Estado, Luis Arce, y al vicepresidente, David Choquehuanca.
Colque anunció que las organizaciones sociales de Oruro han tomado una posición firme en defensa de la democracia y en contra de cualquier intento de desestabilización del gobierno legalmente constituido. Colque recordó los eventos del año 2019, cuando Bolivia «vivió un golpe de Estado», y ha expresado la preocupación por que situaciones similares se repitan. En este sentido, ha afirmado que están en estado de alerta y han decidido no participar en el Congreso del Movimiento Al Socialismo (MAS) en Lauca Ñ.
Preocupación por acciones violentas
Por su parte, Esther Chambi, vicepresidenta del Movimiento Al Socialismo (MAS), hizo hincapié en las supuestas acciones violentas por parte del Gobierno, alegando que se ordenó la gasificación de El Alto y se atentó contra personas vulnerables. Además, mencionó que «desconocieron» al ejecutivo Ismael Mamani, líder sindical campesino. Chambi ha anunciado que las organizaciones sociales estarán presentes para resguardar a los congresistas que participarán en el debate.
Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb) decide no asistir
En contrapartida, la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb), alineada con el Gobierno, ha decidido no asistir al Congreso del MAS en Lauca Ñ y ha convocado a un cabildo para discutir el futuro del partido político. Esta decisión se basa en la creencia de que la convocatoria al Congreso atenta contra la representación de las organizaciones sociales matrices.
Situación política polarizada
La situación política en Bolivia sigue siendo compleja y polarizada, con diferentes sectores tomando posiciones firmes respecto al Congreso del MAS en Lauca Ñ. Mientras algunas organizaciones sociales en Oruro se declaran en estado de alerta para proteger la democracia y respaldar al presidente Arce, otras, alineadas con el Gobierno, han optado por no participar en el evento y convocar a un cabildo.