La exdiputada Lidia Patty ha criticado la falta de compromiso del Defensor del Pueblo, Pedro Callisaya, y ha anunciado que abrirá una oficina de derechos humanos para defender «verdaderamente» a las víctimas.
«Necesitamos una oficina que realmente defienda los derechos humanos. En este momento no tenemos un Defensor del Pueblo. Cuando abramos nuestra oficina de derechos humanos, informaremos junto con ustedes», señaló la exasambleísta.
Además, Patty ha señalado que Callisaya se dedica más a permanecer en su oficina y no sale a la calle donde las personas realmente necesitan ayuda para resolver casos de feminicidio, infanticidio y otros.
Silencio sobre planes futuros
Por otro lado, la exdiputada no quiso referirse a sus planes después de haber sido designada como cónsul en Puno, Perú. Dijo que hablará sobre el tema más adelante cuando sea el momento adecuado.
Designación rechazada por vulnerar mecanismos diplomáticos establecidos
Patty regresó al país después de que su designación como cónsul fuera rechazada por la Cancillería peruana por vulnerar mecanismos diplomáticos establecidos en la Convención de Viena.
La decisión generó críticas desde la oposición boliviana porque aseguraron que el Gobierno pagaba un favor político a Patty por impulsar el caso «golpe», causa por la cual muchas exautoridades del Gobierno interino de Jeanine Añez están siendo procesadas.
Caso «golpe de Estado» continúa en manos de su sobrina
Asimismo, confirmó que el caso «golpe de Estado» continúa en manos de su sobrina Silvia Patty e indicó que tomó esa decisión para fomentar la participación política femenina.