Comer solo lo necesario mejora a largo plazo nuestro cuerpo, según expertos. Comer hasta llenarse no es recomendable, ya que puede provocar malestares físicos y psicológicos al tener más hambre.
Nutricionistas y psiconutricionistas explicaron en una entrevista con la revista de moda Vogue que las señales de saciedad tardan entre 30 y 40 minutos en llegar al cerebro; por lo tanto, recomiendan comer de manera pausada para permitir que estas señales lleguen al cerebro.
“El estrés, el aburrimiento, la falta de sueño y la exposición prolongada a alimentos muy palatables son algunos de los factores que pueden disminuir nuestra sensibilidad frente a nuestros indicadores internos de saciedad”, señaló Gala Freixer, nutricionista de Clinique La Prairie.
La experta recomendó comer conscientemente e identificar todas las señales del organismo para saber cuándo parar y distinguir entre hambre fisiológica y ganas de comer.
Para Freixer, el consumo de alimentos ricos en fibra es una buena opción porque ayuda a tener una mejor sensación de saciedad; además, mantiene niveles estables de glucosa en la sangre y promueve una buena salud intestinal. Los alimentos azucarados solo aumentan las ganas de seguir comiendo.
Por su parte, Ylenia López Llata, experta en psiconutrición y coach nutricional indicó que al momento de comer es necesario estar conscientes del acto: saborear la comida, masticar bien los alimentos mientras se está sentado y conversando con otras personas si se está acompañado; no frente a la computadora, el celular o la televisión.
La experta recomendó beber un vaso de agua, un caldo o una infusión antes de cada comida; comer despacio y masticar bien cada alimento; tener una buena higiene del sueño, ya que la falta de sueño afecta negativamente los ritmos circadianos, alterando la segregación de hormonas reguladoras del hambre y saciedad; y comprar alimentos inteligentemente para consumir aquellos sin grasas saturadas, azúcares refinados, saborizantes o muy procesados.
Comer no es solo saciarse sino alimentarse adecuadamente y dejar al estómago tranquilo con comidas que gusten en caliente.
Es importante combinar diferentes nutrientes como grasas saludables, carbohidratos de absorción lenta, fibra entre otros; además, no debemos olvidar beber suficiente agua para hidratar el cuerpo.
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