El Banco Fassil sigue siendo objeto de controversia en Bolivia. El vocero presidencial, Jorge Richter, ha afirmado que el avance de las investigaciones determinará si hubo un mal manejo financiero o una estafa dentro del banco.
Indicios claros de irregularidades
Según Richter, la constitución de distintas empresas que se beneficiaron de créditos y el desvío de recursos por más de 4.000 millones de bolivianos son indicios claros de irregularidades en la administración del banco.
El Banco Fassil fue intervenido el 26 de abril por la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) debido a denuncias y una serie de irregularidades en su gestión.
Investigación sobre los recursos desviados
Richter insiste en investigar hacia dónde fueron desviados los recursos y ahorros del banco, así como cuántos generaron inestabilidad en la sociedad boliviana.
Apropiación indebida por parte de élites cruceñas
Richter también cuestionó a la élite cruceña que conforma la mayoría de los accionistas del banco y tomó toda la institucionalidad del departamento para apropiarse indebidamente de los recursos financieros depositados por los clientes. Afirmó que estas élites se han apropiado indebidamente de estos recursos para obtener ventajas financieras y políticas.
El Gobierno acompañará las investigaciones respectivas del caso con ayuda e información proporcionada por los medios locales.
