El proyecto de Ley de Incentivos para la Promoción del Deporte, presentado el 21 de marzo por el asambleísta del Movimiento Al Socialismo (MAS), Froilán Mamani, busca liberar de la carga impositiva a las empresas públicas y privadas, para que puedan brindar apoyo económico a los deportistas durante su preparación para las competencias.
Tanto el asambleísta del MAS como el presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), Fernando Costa, coincidieron en que con esta ley aumentará la cooperación a los atletas de las distintas disciplinas y a los proyectos deportivos.
“El miedo de incentivar a los deportes es impuestos, con este proyecto no existe el tema del aporte tributario del aportante al deportista, eso tiene que ser claro”, declaró Mamani, quien adelantó que encontró consenso en la Asamblea para el tratamiento a la brevedad de esta ley y su posterior aprobación. Asimismo, agregó que el Presidente del Estado, Luis Arce, está al tanto de los avances.
Dicha propuesta cuenta con cinco artículos, aunque esta cantidad podría sufrir una modificación. Actualmente, está en la Comisión de Educación, después pasará al Comité y luego pasará a la consulta, a partir de ahí habrá que esperar dos a tres meses para su tratamiento y aprobación.
Esta propuesta tiene como objetivo un incentivo tributario para las empresas públicas y privadas que aporten al deporte, a través de espónsor, donaciones o construcción de infraestructura, que serán deducibles en el Impuesto sobre las Utilidades de las Empresas (IUE); además se propondrá eximir del pago de Impuestos al Valor Agregado (IVA), Impuesto a las Transacciones (IT) e Impuesto sobre las Utilidades de las Empresas a las actividades y eventos deportivos.
Además de propondrá la categorización de trabajadores especiales a los jugadores, “esto si bien está mencionado en la Ley Nacional del Deporte (Nº 804), no se ha reglamentado, aclarado, como debe ser”, indicó Costa.
En dicho acto, estuvo el titular del Comité Olímpico Boliviano (COB), Marzo Arze, e indicó que la colaboración que traiga esta ley debe llegar a la preparación integral de los deportistas y no sólo a los pasajes para obtener resultados internacionales.
“Bolivia maneja un presupuesto anual de un millón de dólares, que se va en el mantenimiento de escenarios deportivos y el pago de salarios del Viceministerio de Deportes. ¿Qué recibe el club o el atleta cuando ganan? Todo el mundo se infla el pecho cuando es importante incentivar mecanismos de colaboración”, señaló Arze en su intervención en el hemiciclo.
