La declaración de zona de desastre y estado de emergencia nacional para el altiplano boliviano, se demandó este martes a las autoridades nacionales desde el Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (Conamaq), con el fin de revertir los efectos de la sequía y la helada.
El Jiliri Apu Mallku Ramiro Jorge Cucho, explicó que la zona andina de Chuquisaca, La Paz, Oruro y Potosí sufrieron graves daños, por lo que enfatizó en que las autoridades de todos los rangos deben trabajar en políticas públicas, para revertir con urgencia todos los daños que dejaron estas inclemencias climatológicas.
“Con carácter de urgencia, con la finalidad de garantizar la soberanía alimentaria de Bolivia, proponemos que las autoridades nacionales, la Asamblea Legislativa y el Gobierno, tomen medidas contra la crisis del cambio climático que estamos atravesando”, declaró según informó LA PATRIA desde la Sede de Gobierno.
Desde el Conamaq aclararon que no tienen el dato exacto de cuántas familias están siendo afectadas por esta problemática, no obstante, solicitaron a gobernaciones, autoridades municipales y a los gobiernos autónomos indígenas que cuantifiquen los daños, porque las pérdidas son muy altas, según su criterio.
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