En menos de dos meses, fueron perseguidos y capturados, al menos 14 líderes de diferentes organizaciones sociales que encabezaron protestas contra el Gobierno. Se acusa a las autoridades gubernamentales de penalizar y castigar, a través de la Fiscalía y la justicia, a dirigentes por exigir que sus demandas sean escuchadas.
Al menos seis representantes de la Asociación Departamental de Productores de Coca (Adepcoca) están con detención preventiva y domiciliaria.
Cuatro dirigentes del Magisterio Urbano de La Paz fueron aprehendidos, luego de la toma del Ministerio de Trabajo; el reciente fin de semana tres dirigentes cívicos de Puerto Quijarro fueron aprehendidos por la muerte de una persona durante el paro indefinido por el Censo de Población y Vivienda y el presidente del Comité Pro Santa Cruz guarda detención domiciliaria las 24 horas, sin derecho a salir al trabajo.
Detenidos de Adepcoca
“Lo que el Gobierno quiere hacer es minimizar las marchas, hacer callar a los dirigentes. Esta estrategia está muy equivocada. Al detener dirigentes no está buscando solución, sino está buscando la confrontación, por eso el pueblo está con estas medidas de presión”, aseguró el ejecutivo de la Federación Provincial Sur Yungas Chulumani, Diego Cahuapaza,
Luego de la toma del mercado paralelo de la coca por miembros de Adepcoca, el Ministerio Público activó mecanismos de persecución penal contra seis dirigentes. La Fiscalía ordenó su aprehensión y pidió su detención carcelaria o domiciliaria, por lo cual fueron imputados por 15, 14 o 13 delitos cada uno.
Entre los capturados por el Gobierno está el presidente de Adepcoca, Freddy Machicado; el dirigente de la Juventud Yungueña, Raúl Uría; el presidente del Comité de Autodefensa de Adepcoca, César Apaza; el dirigente de Cofecay, Gudelia Botitano; Porfirio Rivero; y la vicepresidente del Comité de Autodefensa de la Adepcoca, Rosalba Vargas.
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